A Luis Álvarez, 87 años, los recuerdos le van llegando según avanza la conversación. Son recuerdos de fútbol, del Oviedo, el club al que ha seguido toda su vida. Luis es el socio número 1 del club azul y ayer renovó su vinculación con el club azul. Lleva 77 años, toda una vida. Desde 1940 no ha fallado a su cita. "Al campo no suelo ir últimamente pero lo que no se me olvida es pagar el recibo", dice mientras muestra orgulloso el abono. "Mira, ya soy el número uno", comenta con una amplia sonrisa.

Luis Álvarez llega a la sede de LA NUEVA ESPAÑA acompañado de su hijo Javier. Es un día especial para él. Unas horas antes había ido a sacar su abono del Oviedo, como cada temporada a estas alturas. Allí, en el Carlos Tartiere, le informaron de que era el socio más longevo. Un motivo de orgullo importante.

A Luis le cuesta recordar cuál es su primera imagen con el Oviedo, su recuerdo más antiguo, Cree que tendría 5 o 6 años cuando vio las primeras camisetas azules. Hubo algunos futbolistas que marcaron su relación con el club carbayón. "A Isidro Lángara le cogí en su segunda época en el Oviedo, cuando ya regresó de México. Era más técnico que en su primera etapa, ahí era más cañonero, más de 'pepinazos", relata. "Pero el mejor era Herrerita", matiza a continuación. "Tenía una zancada muy elegante, era genial", añade.

Repasando, encuentra otro atacante de época que captó su atención en su momento: "Era muy bueno Antón, con su boina. Tenía un gran disparo. Un día rompió la red de un tiro. ¡En aquel partido estaba yo en la grada!". También pasaron por Buenavista y el Tartiere algunos rivales de excepción. Eran años en los que el Oviedo se codeaba con lo más selecto del fútbol nacional. "El que más me llamó la atención fue Di Stefano. Colocaba al equipo, mandaba mucho y siempre despistaba a los rivales", recita el aficionado.

Aunque ha dejado de ir al estadio, Luis Álvarez sigue la actualidad del equipo por los medios y mantiene la esperanza de rememorar aquellos duelos en la cumbre de Primera. "Era diferente entonces, cuando venía el Madrid, el Valencia Era otra cosa, para el equipo y para la ciudad. La gente iba a los hoteles a pedir autógrafos", subraya. "Tengo muchas ganas de que vuelva a Primera pero lo veo muy complicado. Cuando no ganamos, me cojo unos disgustos...", dice contrariado.

Su regreso al Carlos Tartiere está cercano. Luis volverá a pisar el estadio este lunes, en el duelo que enfrentará a los azules con el Zaragoza (21.00 horas). Acudirá después de que el Oviedo le haya invitado al Palco de Honor para seguir el choque. Allí será homenajeado por 77 años de fidelidad, el amor que más perdura a unos colores.