La admiración por la figura de Toni Cuervo no se agota dentro del oviedismo. También es alabado por los que alguna vez lo tuvieron como rival. "Para mí es un hombre que ha marcado una época, un referente para todos, como persona y como jugador. Como futbolista lo tenía todo y era muy temperamental. Pero como persona lo superaba", le define Quini, representante institucional del Sporting. Joaquín Alonso, que lo tuvo en frente como entrenador del Oviedo cuando él daba sus primeros pasos en el Sporting (campaña 76-77), coincide: "Era una persona a la que admiraba, un señor, alguien extraordinario. Tuve mucha relación a través de las asociaciones de veteranos de Sporting y Oviedo. Cuando jugábamos siempre quería ganar. Además de buena persona era muy competitivo". Quini culmina: "Es un referente, un espejo para el fútbol asturiano".

Javier Suárez, que ofició el funeral, se refirió a Toni como "un símbolo de la ciudad y una vida dedicada al Real Oviedo". El último adiós fue multitudinario. Estuvieron presentes exjugadores de todas las épocas, además de los ya citados, como Vicente González-Villamil, Javier, Zubeldia, Paco Galán, Taladrid, Santi García-Barrero, Juan Manuel, José María, Armando, Jaime, Oli, Carlos, Uría, Carrete o Miguel Montes. También asistieron representantes de otros ámbitos deportivos y sociales como homenaje a un hombre querido.