Lucas Torró (Concentaina, Alicante, 1994) jugó una sola temporada en el Oviedo pero para él supuso un antes y un después en su carrera. La gran temporada que hizo con la camiseta azul le convirtió en un centrocampista muy cotizado en Segunda, un jugador con proyección que en Oviedo demostró estar capacitado para competir a nivel profesional. El alicantino llegaba cedido por el Madrid, donde no había conseguido tener continuidad con el Castilla por culpa de las lesiones. En el Oviedo jugó 39 partidos de Liga. El pasado verano el futbolista recaló en Osasuna. El club navarro alcanzó un acuerdo con el Madrid para ficharlo sin coste, pero a cambio de darle a la entidad blanca una opción de recompra, que tiene en la actualidad.

- ¿Qué tal le van las cosas en Osasuna?

-Muy bien, estoy muy contento. Me he integrado bien, tengo minutos y el equipo va más o menos bien. Estamos arriba en la clasificación, en general estoy contento con como está yendo la temporada.

- Tuvo algunos problemas de lesiones.

-En pretemporada tuve un golpe en la rodilla, me llevé un buen susto, pensé que era grave. Pero la rodilla absorbió bien el golpe, fue un edema óseo y estuve dos o tres semanas parado. Después tuve un problemilla en el isquio. Espero que ya no me pase nada más, es importante para mí jugar y ayudar al equipo.

- El Oviedo estaba interesado en que siguiera. ¿Cómo fue la negociación que le llevó a fichar finalmente por Osasuna?

-Estuve muy a gusto en el Oviedo, le estoy muy agradecido a la afición y a los compañeros; respecto a la decisión de irme a Osasuna fue porque vi el proyecto y me decanté más por venir aquí. En el Oviedo estuve cedido por el Madrid y yo quería salir con opción de repesca, creía que era lo mejor para seguir adelante con mi carrera.

- ¿Influyó el Madrid en esa decisión?

-La decisión fue mía, me costó mucho tomarla. En Oviedo conocía a la gente, conocía la ciudad, pero creí que la opción de Osasuna era la mejor. Estoy contento aquí, igual que lo estuve allí. Nunca olvidaré que el Oviedo ha sido el club que me ha dado la oportunidad de jugar profesionalmente.

- ¿Qué importancia tiene para usted ese año en el Oviedo?

-En Segunda sólo había jugado a los 17 años unos minutos con el Alcoyano. En el Madrid tuve problemas de lesiones. Para mí el año en el Oviedo ha sido el más importante de mi carrera. Venía de no jugar en el Castilla por las lesiones y jugué mucho, me encontré muy bien. El Oviedo ha sido para mí un trampolín. El Castilla siempre es un buen escaparate para salir a equipos profesionales porque es muy difícil dar el salto al primer equipo. Y el equipo que apostó por mí fue el Oviedo.

- Y le salió una temporada casi redonda.

-Si un equipo apuesta por ti intentas ayudar lo máximo posible, creo que estuve muy bien y tengo muy buen recuerdo.

- Lo peor fue el final de la temporada. ¿Qué pasó para estar metidos en puestos de play-off y acabar encadenando tantas derrotas?

-El partido contra el Huesca nos mató (empataron a uno en casa en la jornada 35). En el Tartiere éramos un equipo fuerte, fuera de casa nos costaba más, nos faltó ganar un par de partidos más fuera. Supongo que el Oviedo habrá aprendido de eso.

- ¿Por qué fue tan importante el partido ante el Huesca?

-A partir de ahí entramos en una mala racha. Nos afectó mucho. El fútbol a veces son rachas, aquí en Osasuna llevábamos once jornadas sin perder y ahora llevamos unas cuantas sin ganar.

- Se suele decir que la Segunda es complicadísima. ¿Está de acuerdo?

-Tienes que hacer una temporada excelente para subir, hay muchos equipos metidos, todos pegados. Ganar un partido cuesta un mundo. Al Cádiz al principio le costó y ahora están segundos. El Oviedo lo mismo, lleva cuatro victorias en los cinco últimos partidos. Yo los veo jugar y están muy bien. Es lo que hace emocionante esta liga.

- ¿Celebraría un gol en el Tartiere el domingo?

-No. El Oviedo me ha dado la oportunidad de jugar al fútbol de manera profesional, me ha dado mucho. No lo celebraría.

- Oviedo y Osasuna son dos plazas históricas, dos equipos que han jugado muchas temporadas en Primera. ¿La presión es similar?

-En Segunda hay siete u ocho equipos peleando por ascender y el Oviedo y Osasuna son dos de ellos. Pamplona y Oviedo son ciudades parecidas, muy futboleras las dos, y eso hace que sean clubes especiales. La presión en el fútbol al final es la que se marca uno mismo.

- ¿Sueña con jugar algún día en Primera?

-Mi sueño siempre ha sido ese. Llevo dos años teniendo continuidad en Segunda, siendo joven en una categoría con muchos veteranos, y ojalá que en un futuro pueda estar en Primera. Pero el futuro no se puede saber.