Se respira alegría y optimismo en El Requexón. La plantilla disfruta del buen momento, pero con calma, y sin llegar a desatar el estado de euforia. El Oviedo ha logrado tres triunfos en las últimas jornadas que le han aupado a rozar la zona de play-off. La buena racha azul se extiende a seis triunfos en los ocho partidos, pero Anquela no deja de trabajar para hacer un llamamiento a la tranquilidad, para advertir sobre la igualdad que hay en la categoría y para señalar que los azules atravesaron un momento delicado en octubre.

El mensaje de prudencia se palpa en la plantilla, que ayer regresó a los entrenamientos. "Sacamos diez puntos al descenso, sólo se mira hacia arriba, pero la realidad es que lo primordial es consolidar el proyecto en Segunda. La mentalidad del equipo es llegar a los 50 puntos de la permanencia. Luego seguro que vendrán cosas mejores", resalta Christian Fernández.

El próximo partido de los azules será el domingo visitando al Sevilla Atlético, un equipo de la zona baja que hace recordar algunos de los pinchazos más notables de este año del Oviedo. "Si vamos con la crecida a Sevilla volveremos a las andadas", destaca el defensa azul. El Oviedo este año perdió en sus visitas al Albacete (2-1) y Alcorcón (2-0), y empató frente Almería y Barça a un tanto. Ante los equipos de la zona baja el conjunto azul ha mostrado este curso su peor versión, a diferencia de con los de la zona alta, donde el Oviedo ha competido a un gran nivel.

El Sevilla Atlético llegará al partido del domingo en penúltima posición, con solo un partido ganado, con trece puntos, y a seis de la permanencia. Una opción propicia para que el Oviedo sume su cuarto triunfo seguido y se lleve por primera vez este curso el premio de entrar en puestos de play-off. "El mérito de este buen momento es de Anquela, y se le reconoce poco porque igual no tiene el nombre de otros predecesores u otros sabios del fútbol con mejor prensa, pero ha sido él quien nunca ha dejado de creer en nosotros y en la idea de fútbol que ahora plasmamos", destaca Fernández.

Sin Viti ni Pucko

El Oviedo volvió ayer a entrenarse en El Requexón, con las ausencias de Viti y Pucko, pendientes de conocer el alcance de las molestias que puedan tener. En el caso del canterano cobra especial interés conocer su estado, ya que llevaba dos partidos seguidos disputando minutos, tras haberse perdido catorce por lesión.

La otra nota positiva es que Aarón Ñíguez continúa evolucionando favorablemente de su lesión y cada vez está más cerca su regreso, ya que ayer se entrenó a buen ritmo junto a sus compañeros. Ñíguez se lesionó en el partido ante el Numancia con una elongación muscular y se perdió los dos últimos partidos de Liga frente al Lorca y Osasuna. Su puesto en el ataque lo ocupó Yeboah, que cuajó dos grandes actuaciones en ambos partidos y ha aprovechado su oportunidad en el once inicial.