Juan Antonio Anquela llegó el pasado domingo a la sala de prensa de El Alcoraz y una de las primeras cosas que hizo fue elogiar a sus jugadores, especialmente por la primera parte disputada. El elogio fue intenso, quizá el mayor de la temporada. Fue exactamente así: "Al descanso solamente había palabras de agradecimiento por el esfuerzo, por jugar bien al fútbol y por hacer lo que se pide. Ojalá dure mucho porque es el único camino".

El Oviedo, en efecto, había sido mejor que el Huesca en una primera parte muy buena. El equipo titular era el mismo que el que había acabado el año. Y, salvo sorpresa, será el mismo que salte mañana al campo de Vallecas, segunda salida consecutiva fuera, segundo rival de arriba que pone a prueba la capacidad de resistencia azul.

Al entrenador andaluz no le gusta tocar lo que funciona, lo ha demostrado, así que salvo contratiempo repetirá once por tercera jornada consecutiva, de Alfonso Herrero a Linares, los dos futbolistas desafortunados en El Alcoraz. La defensa volverá a mostrar a los cinco de siempre, con Diegui en el carril derecho, Carlos, Forlín y Christian en el centro de la zaga, y Mossa en el carril izquierdo. Aquí hay una clave: de estos cinco futbolistas, tres (Forlín, Christian y Mossa) están al borde de la suspensión por cumplir ciclo de tarjetas amarillas. El Oviedo recurrió la que vio Forlín ante el Huesca, opción desestimada ayer por Competición. Así que si ven otra cartulina se perderán el siguiente encuentro ante el Almería en casa. La cercanía a del derbi asturiano ante el Sporting hace previsible que alguno de ellos vean la tarjeta o mañana o en los próximos partidos.

La ausencia de Yeboah, que sigue en su país y no se le espera hasta la próxima semana, elimina la duda en la derecha, donde Aarón Ñíguez es fijo, más tras su genialidad en El Alcoraz. Folch, que también está a una amarilla de tener que descansar, repetirá junto a Rocha, sorpresa en Huesca y decisivo en partidos duros como el del Sevilla Atlético. Saúl Berjón, el que más minutos juega tras Folch, embestirá desde la izquierda y arriba, salvo sorpresa, embocará Linares, que se ha ganado el puesto por la lesión de Toché. El murciano dijo el martes que su función ahora era la de apretar en los entrenamientos para volver.