La idea desde el primer momento era la de estar en un segundo plano, no acaparar los focos. Arturo Elías aterrizó el viernes en Asturias desde México con la firme intención de no alterar los planes del equipo. Anquela había optado desde el primer momento por el sosiego y por repetir la rutina de las últimas semanas, la que había dado tan buenos resultados. Elías intentó seguir desde su llegada un rol secundario, dejando el protagonismo en los jugadores, al menos hasta la disputa del choque, Una vez conquistado el derbi, el mexicano sí se dio un baño de masas con el Tartiere como escenario de la ilusión.

Tras la colección de emociones vivida, participando incluso activamente en la "haka islandesa" con la que los futbolistas dieron las gracias al Carlos Tartiere, Arturo Elías encontró un momento para valorar su cuarta visita a Oviedo para comprobar in situ que el club por el que apostó el grupo Carso en 2012 sigue su marcha por la buena senda. "Me siento en mi casa, en mi ciudad y en mi estadio. Y eso me emociona mucho. Jugar este derbi y ganarlo de la manera en la que se dio es una emoción que solo el fútbol te puede dar", explicó el mexicano en la televisión del club.

Ya en las horas previas al encuentro, Elías se había mostrado encantado con la marcha del equipo. Citó el empresario en el aeropuerto las tres claves que, a su juicio, debe reunir un equipo que aspire a lo más alto en cualquier campeonato: "Unidad, humildad y trabajo duro". Para el mexicano, este Oviedo reúne las tres características. Antes de regresar a México, insistió en la idea: "En el campo se ve humildad, garra en cada partido y unidad. Y cuando hablo de unidad me refiero a la que hay entre esta directiva, el cuerpo técnico, los jugadores y, sobre todo, la afición".

Cumplido su objetivo en la visita con una experiencia que "mi familia ni yo no olvidaremos", ahora toca centrar los esfuerzos en luchar por el ascenso a Primera. Una meta que Elías ve con optimismo: "Este año tiene que ser. Espero verlos por aquí en junio porque tenemos que ver ese partido del ascenso".

Las sensaciones en la expedición mexicana desplazada a Oviedo fueron inmejorables tras la rápida visita del fin de semana. Tanto, que la idea es regresar al final de la presente temporada, como reveló el yerno de Slim, para algún encuentro en el que el Oviedo se juegue cosas importantes.

Arturo Elías dejó ayer tierras asturianas con el mejor sabor de boca posible tras la victoria. La buena marcha del equipo en la Liga, tercero, se une a la victoria en el partido más esperado de la temporada. Pero Anquela quiere mantener la intensidad. El equipo regresa hoy a los entrenamientos (10.30 horas, en San Gregorio) para centrarse en el duelo del sábado ante el Cádiz. El encuentro será dirigido por Juan Luis Pulido Santana, del comité canario. El árbitro tiene 34 años y vive su segunda temporada en la categoría. El año pasado dirigió tres partidos del Oviedo, incluida la victoria 0-2 ante, precisamente, el Cádiz. Anteriormente había arbitrado durante 10 años en Segunda B.