El Real Oviedo no pudo aumentar su espectacular racha de diez partidos sin perder tras caer derrotado ante un Cádiz en superioridad numérica durante más de una hora debida a una injusta expulsión de David Rocha en una normal lucha por un balón dividido mediada la primera parte.

Esta extraña decisión del colegiado, que dejó boquiabiertos a los azules, condicionó un partido que hasta el momento estaba completamente controlado por los de Anquela y en el cual no estaban teniendo demasiados problemas para detener las dos peligrosas bandas del equipo de Cervera.

A pesar de ello, el conjunto azul supo adaptarse a esta adversa situación. Adelantando a Forlín al centro del campo y volviendo a defensa de cuatro pudo aguantar hasta el descanso sin mayores sobresaltos.

El paso por vestuarios revolucionó al equipo local que ya realizó dos cambios en el intermedio buscando la superioridad y rapidez por las bandas con la inclusión de Perea para acompañar a Álvaro y a Salvi.

El Oviedo seguía defendiendo con contundencia y supo aprovechar una de sus mayores virtudes para ponerse por delante en el marcador. Falta lateral botada por Berjón en el minuto 54. Un jugador local peina la pelota en el primer palo y Linares, casi de espaldas y con la coronilla, consigue introducir la pelota en la portería de un sorprendido Cifuentes.

De aquí al final el Cádiz se volcó sobre la portería de Alfonso Herrero. La mayoría de los acercamientos culminaban con balones al área ya fuera en centros laterales, faltas y saque de esquina que normalmente eran bien defendidos por los visitantes.

Sin embargo, en el minuto 71, una jugada de varias fases, en las que el balón pasó de un lado a otro del terreno de juego, consiguió descolocar ligeramente a la defensa azul. Lo justo para que Perea aprovechara un balón caído en el lateral del área para desembarazarse de dos rivales y colocar su disparo a la escuadra en una fenomenal jugada.

Poco antes Christian había tenido el segundo en un claro remate de cabeza en una de las últimas ocasiones de los ovetenses a los que, lógicamente, se les iba acabando la gasolina con el tiempo.

En un saque de esquina, a falta de diez minutos, fue Servando el que de cabeza marcó el tanto de la victoria para los locales.

Lo intentó el Oviedo con Toché y Linares sobre el césped pero estuvo más cerca el Cádiz de marcar el tercero que los asturianos de lograr el empate.

Final del partido y primera derrota de los de Anquela en casi tres meses. No deja sin embargo malas sensaciones un equipo azul que compitió hasta el final pero que no pudo contener las acometidas de un buen rival que se volcó en busca de la victoria tras la expulsión de Rocha.

Encuentro claramente marcado por la polémica expulsión. Hasta ese momento no había ocurrido prácticamente nada en ataque por ninguno de los dos bandos. Desde entonces los locales buscaron la victoria con insistencia y los azules solo pudieron aguantar hasta el minuto 80 tras ponerse por delante en el marcador.

El Real Oviedo retomará la actividad competitiva el próximo sábado a las 18:00h en el Carlos Tartiere para enfrentarse al Albacete BP.