El entrenador del Oviedo, Juan Antonio Anquela, se ha mostrado orgulloso de la entrega de su equipo pero decepcionado con el resultado, un 0-1 que, según el técnico jienense, su equipo no mereció porque, dijo, fue el que más buscó la victoria. "Hay que levantar la cabeza", ha repetido Anquela. Esta ha sido su comparecencia.

Partido. Estoy muy orgulloso de lo que han hecho mis chavales. -ha peleado hasta el últmo segundo, ha hecho mérito suficientes para ganar el partido. No queda otra que levantar la cabeza y seguir hacia adelante.

Imprecisones. Hemos tenido demasiadas imprecisiones. Nos faltó calma y sosiego. Pero en la segunda parte el equipo ha hecho todo. Ha creado ocasiones de gol claras. Hemos metido gol, no sé si está ebn fuera de juego o no. Hemos tenido acciones claras. Este juego es así de cruel e ingrato. LE ha ido a pasar al que nunca debía haberle pasado (Viti). Esto sigue y hay que levantar la cabeza. Ahora es cuando se ve a todo el mundo. Estamos con problemas porque no ganamos un partido que pudimos hacerlo.

Jugada final. Al final nos descompusimos. En una jugada desgraciada, en lugar de ganar nosotros el partido hemos perdido el partido en lugar de ganarlo. Mi equipo se ha dejado el alma y se ha vaciado hasta el último balón. A levantar la cabeza y a seguir para adelante. Esto es largo.

Apuesta por Hidi. Mariga vino lesionado y el que nos quedaba Hidi. Lo intentó Patrick, ,pero no ha estado afortunado. Decidimos cambiarlo.

Mala racha en el Tartiere. Los otros partidos no me acuerdo. Hoy el equipo ha hecho opciones y jugadas de relativo peligro. Es el único equipo que ha intentado ganar el encuentro. Enfrente el rival no se ha descompuesto. Y aprovechó una ocasión. Le hemos creado ocasiones de gol. El resultado no ha venido. Estamos tristes.

Sistema. Es el sistema que teníamos al principio. Hemos cambiado a los 3. El 4-2-3-1 es el sistema que siempre hemos tenido en la cabeza. Pero nunca hemos podido hacerlo porque nos ha faltado ese hombre. Estoy contento de lo que hemos hecho con los dos sistemas. Pero vuelvo a repetir: cuando uno da todo en el campo y ve a Viti llorar como una madalena, uno que es más oviedista que el escudo, eso da pena. Ese es el fiel reflejo. Le ha ido a pasar a quien más lo siente. Y a quien menos le debería de pasar. A Viti le queda mucho tiempo para levantase.

Mensaje a la afición: Cuando un equipo tiene dudas, tenemos que estar todos a una. Cuando a los futbolistas se les ve inseguros, no se les puede apretar tanto. Pero este público es exigente. Estoy orgulloso de mi equipo, de mi afición y de todo lo que es el Real Oviedo. El fútbol te depara sorpresas y hoy la hemos tenido gorda. El equipo tiene la suficiente moral para reponernos de un golpe como este.