Ya se sabe, lo repite Anquela en cada comparecencia, que en el Oviedo las cosas que funcionan no se tocan. El entrenador del Oviedo ha sido fiel a esta máxima durante toda la temporada. Cosa que daba resultado, cosa que se mantenía la siguiente jornada. Por eso el jienense hará lo propio mañana ante el Valladolid y, salvo sorpresa mayúscula, el Oviedo saltará al Tartiere con el 4-2-3-1 que luce ahora y con los mismos jugadores que formaron de inicio en las dos victorias ante el Lugo (0-1) y el Nástic (1-0).

El preparador andaluz encuentra en los resultados el principal motivo para apostar por el dibujo de cuatro defensas. Casualidad o no, el equipo ha acelerado su marcha desde que Anquela varió su dibujo (seis puntos de seis que le han devuelto al play-off), así que el técnico no encuentra ahora ningún motivo para dar marcha atrás, teniendo en cuenta además que ese 4-2-3-1 es su sistema de cabecera, el molde con el que quiso hacer funcionar al equipo desde el inicio de temporada, alterado por la inesperada lesión de Fabbrini en el verano, a los pocos días de llegar.

El italiano, precisamente, es quizá la figura que ha motivado el cambio de sistema. En el sistema con cinco defensas no tiene acomodo en la media punta, su posición natural. En éste, en cambio, sí hay una posición para él. En el centro, con libertad de movimientos, es donde mejor desarrolla su juego. Frente al Nástic, por ejemplo, fue uno de los más destacados. Recibió la mayoría de faltas de su equipo.

A Fabbrini le acompañarán Berjón en la izquierda, líder natural del equipo, y Ñíguez en la derecha, futbolista capaz de resolver un partido. Toché actuará de enganche después de sus dos asistencias. Folch es un fijo y, a su vera, Mariga ha ganado la partida a Rocha. La línea de cuatro se mantiene con los laterales menos ofensivos (Cotugno y Christian) y con Carlos y Forlín como pareja de centrales, con Alfonso muy asentado en la portería. Salvo contratiempo, el equipo será el citado. Con él, Anquela ha logrado llegar a los 56 puntos después de 35 jornadas, más que sus antecesores: Hierro llevaba 53, los mismos que Egea. Si gana, el Oviedo estará una semana más en play-off de ascenso a Primera.