Anquela confirmó ayer que él mismo pidió referencias sobre Richard Boateng, jugador ghanés del Melilla con el que negocia el Oviedo de cara a la próxima temporada, pero deslizó que el acuerdo del club con el futbolista aún está pendiente de cerrarse. El jienense, como desveló el miércoles este diario, telefoneó al exentrenador del Melilla, Manolo Herrero, para preguntarle sobre las cualidades de este mediapunta llegador de 25 años que el año pasado anotó 14 goles en el grupo IV de la Segunda B. "Claro, si ya lo sabéis todos no voy a decir que no (sobre el interés del club en Boateng). A mí me dice Ángel (Martín González, secretario técnico) que hay un futbolista en el Melilla... Entonces yo llamo al entrenador (Manolo Herrero), que es amigo mío a muerte y le pregunto. Me dice que ha hecho buen año, que empezó un poco 'atontao', que no se enteraba, pero que luego estuvo impresionante y metió catorce goles", señaló.

El interés, por tanto, ya es reconocido públicamente, pero ahora viene la otra pata de la mesa; las dificultades que tiene el Oviedo para fichar futbolistas por las altas pretensiones económicas que tienen los jugadores, algo que trae de cabeza Anquela. "Este venía aquí que se pensaba que esto era el jubileo", dejó caer sobre las pretensiones económicas de Boateng. "Ahora tenemos que mirar esas cosas, hay que mirar. Y luego intentar decir, aquí me gasto tanto dinero y luego guardo un poquito. No sabéis cómo está esto, si lo pide el Oviedo...", dijo. El jienense insiste: "El Oviedo te va a pagar lo que puede pagar, y deberíamos seguir por ese camino". Por tanto, aunque hay interés en las dos partes por cristalizar la operación( el propio jugador declaró ayer su interés por recalar en el club carbayón, "me gustaría jugar en el Oviedo, es un equipo histórico", dijo a este periódico), el económico es uno de los escollos a superar.

Apoyo al Huesca. Anquela puso la mano en el fuego ayer por su exequipo, el Huesca, que llega ascendido al Tartiere y expedientado por el Comité de Competición por un posible amaño en su partido ante el Nàstic, la jornada anterior. "Yo no vi dejadez del Huesca porque esos futbolistas no lo van a hacer jamás: son unos profesionales como la copa de un pino. Y ese club tampoco lo permitiría, y el entrenador menos todavía", afirmó.