El Oviedo, tres años después del regreso al fútbol profesional, se ha acostumbrado a tener cierta estabilidad en la categoría de plata. Los azules, en estos tres años, han quedado siempre en la zona media de la clasificación y han mejorado incluso el puesto en la tabla: novenos en la 2015-2016, octavos en la 2016-2017 y séptimos este curso recién finalizado. Los azules se mantienen constantes a diferencia de otros conjuntos que también se colaron en la LFP a partir del año 2015, cuando el Oviedo salió de las catacumbas. Los equipos que dieron el salto a Segunda desde esa temporada, la 14-15, un total de 12 conjuntos, las han visto de todos los colores: ascensos, promociones y descensos. No como los azules, que completaron tres temporadas muy parecidas, al menos en los números. No han logrado acabar nunca en la promoción, objetivo este año, pese a rondar incluso los puestos de ascenso directo en varios momentos de los tres campeonatos.

En 2015, con el Oviedo, ascendieron el Nàstic, el Huesca y el Bilbao Athletic. Los catalanes, con Vicente Moreno al frente y con Mossa y Rocha en la plantilla, aunque este último dejó el club en el mercado de invierno para poner rumbo a Estados Unidos, quedaron terceros en Segunda al año siguiente, a solo tres puntos del Leganés, que ascendió directo. Jugaron el play-off y cayeron en la primera ronda ante Osasuna, que fue el que logró el ascenso por la vía de la promoción tras colarse in extremis goleando al Oviedo en el Tartiere (1-5). El Huesca, que también ascendió a Segunda esa temporada, se quedó a mitad de tabla, en el puesto 12, con Anquela al frente desde noviembre de 2015. El filial del Athletic, también ascendido ese año y regresó a Segunda B. El Oviedo, con Egea al frente primero y más tarde Generelo, terminó noveno, a 5 puntos de la promoción de ascenso, marcada por el Osasuna.

En la temporada siguiente, la 16-17, con Hierro dirigiendo la nave azul, llegaron a Segunda el Cádiz, el Sevilla Atlético, el Reus y el UCAM Murcia. Los gaditanos se metieron en play-off, eliminados ante el Tenerife. También jugaría la promoción el Huesca de Anquela, que fue eliminado por el Getafe, que ascendería a Primera. De los otros equipos que ascendieron a Segunda ese año, lograron la permanencia el Sevilla Atlético y el Reus. El UCAM dijo adiós a la categoría de plata ese mismo año y volvió a Segunda B.

El Oviedo de Hierro mejoró los registros de Egea y Generelo, ganó un puesto, quedando octavo, y logró dos puntos más que la temporada pasada, acabando con 69. Los azules llegaron con opciones remotas de colarse en la promoción en la última jornada contra el Elche, pero acabaron a solo dos puntos del play-off. En esta última campaña, el Huesca, que subió a Segunda a la vez que el Oviedo en 2015, logró el primer ascenso a Primera de su historia El Rayo es el otro equipo que ascendió a Primera. La Cultural regresó a Segunda B, como el Lorca y el filial del Barcelona, que estaban recién ascendidos a la categoría de plata. El Albacete de Erice y Susaeta, el otro que subió a Segunda el año pasado, logró salvar la categoría, su objetivo. Aún queda otra plaza para Primera.