Jaime Bernardo Granda vino al mundo en pretemporada para que su padre, Toño Bernardo, no se perdiera ningún partido de su Oviedo. A las pocas horas de nacer, el pasado 16 de junio, Jaime ya se había convertido en socio de Symmachiarii y del Real Oviedo. Fredy y Ainhoa, amigos de la familia, fueron los que completaron los trámites; cuentan que fueron tan veloces que casi se adelantan a que Vero Granda, la madre, diera a luz al pequeño. El padre, fiel seguidor de Linares, solo lamenta que el pequeño no pueda debutar en el Tartiere viendo al aragonés con la zamarra azul.