Día a día, Anquela muestra sus primeras pistas en El Requexón. Aún es pronto para sacar conclusiones definitivas pero, a veces, los primeros impulsos son relevantes. Los de Anquela se dirigen a un 4-3-3 cuya fuerza reside en el centro del campo. La medular, uno de los quebraderos de cabeza para el técnico el pasado curso, ha sufrido una renovación total. El último en llegar es Javi Muñoz, cedido por el Alavés, y será el encargado de añadir talento al centro del campo azul.

La apuesta por un centro del campo creativo parece claro a estas alturas. Entre los pivotes, solo Folch sobrevive respecto a la temporada pasada. Se han ido Rocha y Mariga, mientras que Hidi está en la rampa de salida. Los dos primeros fichajes para la zona avisaban de las intenciones. Tejera tiene un perfil de pivote imaginativo y Boateng, que se defiende con la pelota, es un llegador, justo lo que no tenía el Oviedo el pasado curso. Saúl, en El Requexón. El internacional del Atlético, tras su participación en el Mundial, vistió ayer en Oviedo a su hermano Aarón.