Juan Antonio Anquela llega al duelo Cádiz ronco, con la voz en carne viva. Quizá porque el técnico del Oviedo se ha pasado toda la semana insistiendo a sus jugadores lo importante que es cuidar la defensa. Ha sido la dinámica de los últimos días en El Requexón, ensayar ejercicios defensivos en aras de echar el cerrojo atrás. Es el reto de los azules hoy en Cádiz, aunque Anquela, que es de los que en el fútbol aplica la máxima de "que lo compre quien lo entienda", espera la ansiada mejoría, aunque sea casi imposible de garantizar: "No lo sé (sobre si el equipo aprendió de los fallos en Córdoba), ojalá se hayan corregido. Fueron errores puntuales ante un buen equipo como es el Córdoba. Estamos preparados para competir en Segunda, donde es importante saber jugar sin balón y saber defender", dijo ayer el técnico en El Requexón antes de volar a Andalucía. Los azules mostraron dos versiones diferentes en las dos primeras jornadas, dominantes sin premio ante el Extremadura y eficaces contra el Córdoba en la primera victoria. Anquela, lo que quiere por encima de todo, es un conjunto que no se vuelva loco: "Quiero un equipo que tenga equilibrio, que hagamos lo que trabajamos. No pido más, es fácil. Exijo lo que se puede, pero dentro del campo y cuando rueda la pelota las cosas son diferentes".

El Oviedo apunta a presentar el mismo once que en las dos primeras jornadas (un empate y una victoria) y Anquela no esconde sus cartas: "Lo dije la semana pasada, si las cosas van bien seguiremos por ahí, si hay que modificar se modifica. Yo miro para atrás y veo gente con nivel y a ver si podemos dar todos un poquito más y competir por algo bonito", afirmó. Aprovechó el jienense el último día de cierre de mercado para hacer un balance general del equipo, aunque la plantilla del Oviedo lleva cerrada desde la llegada de Alanís hace escasos días: "Estoy contento con lo que hacemos cada día y los partidos no fueron mal. Es para estar contento, pero lo que es blanco mañana es negro, y al revés. Lo que mas me preocupa son los dientes de sierra (referido a los vaivenes del fútbol), porque en Segunda hay que estar tranquilos".

Anquela también realizó su primera valoración pública de Alanís, que competirá en la defensa por un puesto con Forlín, Carlos Hernández y Christian Fernández. Por lo dicho por el técnico, que utilizó un curioso apelativo para Alanís parece que la entrada del mexicano en el equipo va para largo: "Todavía no he visto nada, el hombre lleva dos días. Hay que darle su tiempo y estar tranquilos. Es un futbolista internacional con la selección de México, y allí no juega cualquier peinaovejas. Para jugar con México hay que ser muy bueno, y él juega en ese equipo. Con eso se dice todo, pero hay que tener paciencia. Sabe que viene a un equipo que está hecho y que hay gente que le lleva dos meses de ventaja. Su calidad debe de ser, como en la mili, que se le supone, porque en México no juega cualquiera", comentó.

El fichaje del mexicano, mediáticamente, fue lo más sonado en Oviedo desde hace varias temporadas, pero Anquela, que del fútbol detesta todo lo que no sean once y un balón, se quiere centrar solo en Cádiz: "No me he enterado de nada, no sé lo que es mediático ni nada. Se que viene aquí, que entrena conmigo y que tengo un futbolista más y ahora hace falta que sea bueno. Lo que se opine por fuera me la trae al pairo, sin cuidado. Quiero verle en el verde, cómo entrena y cómo trabaja. Si está para jugar, jugará; y si no, pues no jugará", aseguró Anquela sobre su nuevo central azteca. Folch y Carlos Martínez se quedaron en Oviedo por precaución, pero Anquela, que lo hace siempre que se le pregunta, volvió a alabar la figura del mediocentro catalán: "Ramón bien, para quedarse aquí (en Oviedo), de momento. Cuando esté al cien por cien dará el paso, de momento tranquilidad. Es lo suficientemente inteligente para saber cuándo tiene que empezar a competir. Carlos está bien, pero todavía le falta un pelín", dijo. Sobre el Cádiz, rival de esta tarde, Anquela fue muy elogioso: "Vamos a uno de los campos más difíciles de la categoría. El Cádiz juega de memoria y lo hace muy bien. Lo tienen muy claro, no cambian en su forma de jugar. Han encontrado a un chaval de la cantera (Manu Vallejo) que lo hace perfecto y tienen dinero. El Cádiz siempre estará ahí".