Paco Herrera cumple 65 años el día que regresa al estadio de Gran Canaria, el lugar en el que logró el ascenso a Primera en su última experiencia con el conjunto amarillo. Se estrena en casa tras el varapalo de su debut: 4-1 en Cádiz la semana pasada. Y lo hace pensando únicamente en una victoria que revitalice las opciones de los suyos.
Herrera insistió ayer en que Las Palmas tiene "buenos jugadores, buena plantilla", pero no funciona "como un equipo", y encontrarlo es su "principal trabajo". "No podemos hacer una jugada preciosa y luego pasar a otro renglón mucho más bajo. En lo que más empeño pongo es en encontrar la regularidad, un equipo que quiera tener la pelota y ganar con ella, pero también fajarse en defensa, porque la recuperamos muy atrás, y ese es uno de los mayores problemas", comentó. El entrenador, amigo de Anquela ("al que aprecio mucho"), alabó al Oviedo por "tener una idea definida, que hace más fuerte al equipo". Y comparó el funcionamiento de los azules con el del Cádiz, que la semana pasada pasó por encima de los canarios.
