Granada como salto. El Oviedo encarrila el encuentro del sábado en Los Cármenes (16.00 horas) como la oportunidad perfecta para olvidarse de la dura derrota ante el Almería en el Tartiere (1-2). Creen desde el vestuario azul que la línea de trabajo es la correcta y que lo sucedido el pasado sábado es un simple bache en la buena dinámica que iniciaron los carbayones tras ganar el derbi. El ánimo es positivo para viajar a Granada a enfrentarse al actual líder de Segunda, y los precedentes, también. El Oviedo, desde su ascenso a Segunda en 2015, registra unos números bastante considerables cuando se han cruzado en su camino equipos que comandan la tabla. En tres temporadas, de siete enfrentamientos con los de arriba sólo ha perdido en uno de ellos.
El precedente más próximo sucedió en enero. El Oviedo se enfrentó ante el Huesca en el Alcoraz y logró un valioso empate en un encuentro en el que los azules desperdiciaron un penalti. El Huesca ascendió al final de esta temporada. No fue al único líder al que desbancaron los de Anquela campaña anterior. El Lugo llegó al Tartiere como primero en Segunda y se enfrentó a un Oviedo con dudas, que logró una meritoria remontada que a la postre significaría un cambio en la inercia del equipo que le llevó a los puestos altos de la tabla. Unas semanas antes, en el inicio de campeonato, se enfrentó de forma consecutiva contra dos líderes diferentes.
El primero de ellos fue el Sporting, en el primer derbi asturiano en 14 años disputado en El Molinón. El Oviedo llegó al encuentro con numerosas bajas -como esta jornada- y empató en el tramo final del encuentro gracias a un gol de Toché. En la siguiente jornada el Oviedo recibió al Cádiz en casa, un viejo conocido que llegaba a Oviedo líder y regresó a Andalucía derrotado (1-0, gol de Toché). Pero la eficacia ante los primeros no se acaba con Anquela.
Hace dos temporadas, con Fernando Hierro al frente del equipo, el Oviedo le plantó cara al Levante en casa, que fue el líder indiscutible de Segunda durante el mayor tramo del campeonato. En el Tartiere, en el partido correspondiente a la jornada 15, los azules ganaron a los de por aquel entonces entrenados por el asturiano Juan Ramón López Muñiz (2-0). El encuentro fue especial para el oviedismo, ya que supuso el primer gol en Liga de Michu en el año de su regreso. En el partido de vuelta, en Valencia, los azules cayeron por 1-0 -la única derrota ante un líder en tres años-. En el año del regreso, con Egea al frente, el Oviedo recibió al Alavés en el Tartiere en la jornada 23, que era líder en ese momento, y el partido acabó en tablas (1-1). El Alavés acabó la temporada ascendiendo a Primera División.
