La primera conclusión que muestran los datos parece confirmar la sensación general: el Oviedo está cómodo en el cuerpo a cuerpo, pero sufre cuando le toca exponer con la pelota. Es como si los azules se vieran condenados a seguir el guion del curso pasado en su intento de brillar en una competición que lleva a los equipos al límite. Cumplida la primera mitad de la competición, con el equipo de Anquela asentado en la novena plaza, a cinco puntos del play-off, y las perspectivas mejoradas tras dos victorias consecutivas, ya se pueden sacar algunas conclusiones. Las hay que tienen reflejo en la estadística: el Oviedo es el equipo de Segunda que más duelos ha ganado y, sin embargo, ofrece uno de los porcentajes más pobres en pases acertados. Con estos datos se puede empezar a trazar el dibujo de un equipo que aspira a estar entre los seis primeros.

Poderoso en el juego aéreo y con facilidad para ganar los balones sin dueño, el Oviedo muestra condiciones de equipo físico, de estilo directo. Es el conjunto de Segunda que más duelos ha ganado (1.300) en la primera vuelta. También es el equipo que más disputas aéreas gana, con 553.

A pesar de que el rendimiento defensivo ha estado en entredicho (los 26 goles en contra son el peor registro entre los diez primeros) sí ha logrado limitar las ocasiones del contrario: los azules solo han recibido 64 disparos en contra, el tercer equipo de Segunda con mejor bagaje en este aspecto.