El 2-1, la acción que definió el choque justo antes del descanso, situó a Johannesson como protagonista. No habrá sido el gol más bonito de su carrera, pero sí uno que sirve al equipo para refrendar las buenas sensaciones en el inicio de año. Tras empujar el balón a la red y expulsar un grito de rabia, Johannesson señaló el 2 y 3 con los dedos. Un guiño hacia Mossa (el número 23 del equipo), que permanece de baja por un fuerte dolor abdominal del que se investiga la causa. "Aún no sabemos lo que tiene y quería dedicarle el gol porque no está pasándolo bien", señaló el ayer extremo del Oviedo.

Johannesson confesó cómo se había fraguado la acción del tanto en los días previos: "Tenía claro que si Yoel (Bárcenas) tiraba a puerta el portero podía rechaza su intento. Lo habíamos hablado durante la semana: había que estar atentos a los rechaces del portero. Por eso me dirijo hacia la portería".

Para el internacional por Islandia, la victoria ante un rival de entidad sirve para subrayar la mejoría de los azules en esta segunda mitad de la competición. que ya acarician la zona de play-off. "En la segunda parte nos sentimos más cómodos que en la primera. En el final del partido, no nos hicieron apenas ocasiones y eso quiere decir muchas cosas buenas: siempre competimos, en todos los campos y contra cualquier rival", expresó.