La agónica victoria del Nàstic ante el Albacete (1-0 con un penalti transformado en el tiempo añadido) suponen tres puntos de oxígeno para los de Quique Martín antes de su visita al Carlos Tartiere. El triunfo permite al Nàstic abandonar el último puesto de la tabla, excluido el Reus, y situarse a siete puntos del Lugo y del Zaragoza, los que marcan la línea de la salvación. Para la cita del domingo, el entrenador tiene dos bajas seguras, la de los lesionados Javi Márquez y Sebas Coris. El primero sufrió un accidente de tráfico a finales de febrero que le produjo una fractura en el esternón y que le mantendrá todo el mes fuera de los terrenos de juego. En cuanto a Coris, se someterá esa semana a una operación para tratar de que sus problemas de lumbalgia desaparezcan.