Más de ocho mil hinchas del Oviedo se perdieron el inicio del partido ante el Dépor y no entraron al Tartiere hasta el minuto 12 como signo de protesta ante la Liga. Ese partido lo ganó el Oviedo, que demostró músculo y una gran unión club-afición en el primer partido después del comunicado en el que la institución anunció su plante ante la Liga por el injusto trato, según la entidad, recibe en los últimos tiempo la hinchada del Oviedo, especialmente en los desplazamientos como visitante.

Antes del minuto 12 en el Tartiere sólo se escuchaba a los más de 3.000 hinchas del Dépor, repartidos en varios puntos del estadio. Algún tímido cántico en las desangeladas tribunas locales contra Javier Tebas, el presidente de patronal de clubes, y los aledaños del estadio hasta los topes de hinchas del Oviedo. El partido, hasta el 12, no se jugaba en el césped.

Por primera vez en 19 años no sonó el himno azul a la salida de los jugadores, tampoco se recitaron con energía las alineaciones de los carbayones y un gol del Oviedo en casa, el 1-0 de Bárcenas, fue más celebrado fuera del estadio que dentro. Según datos del club, la entrada al inicio del encuentro era de 10.073 hinchas.

Al descanso, tras la entrada del resto de hinchas que secundaron la protesta, la cifra ascendía a 18.135.