El Real Oviedo ha visto muy complicadas sus aspiraciones de entrar en el playoff tras una dolorosa derrota ante un Málaga superior que fue capaz de marcar dos nuevos tantos pese a jugar en inferioridad numérica durante una hora y haber encajado previamente el primer gol tras un inocente penalti de Ibra.

Los azules se lo jugaban todo en un enfrentamiento ante un rival directo. Una victoria de los asturianos les colocaría a un solo punto de la promoción de ascenso y salieron enchufados en busca de la misma o, al menos, de plantar cara al poderoso rival.

Todas estas buenas sensaciones se fueron al traste tras un córner rechazado por la zaga ovetense y en la que Ibra, al tratar de robar la pelota, se llevó por delante a Ontiveros de forma grosera.

Adrián adelantó a los malaguistas al transformar la pena máxima dando paso a una fase de desconcierto azul y dominio local.

Al filo de la media hora, llegó la jugada decisiva del partido. Keidi Bare golpeó a Ibra con los tacos a la altura de su cabeza decidiendo Pulido Santana que la jugada era merecedora de expulsión.

A pesar de jugar en superioridad, el Oviedo no controlaba el encuentro ni tampoco lo pausaba permitiendo a los locales salidas a la contra sin demasiado esfuerzo.

Los ovetenses necesitaban el descanso para reorganizar ideas pero, justo antes del mismo, Ontiveros puso la puntilla a los visitantes con un gran disparo que colocó en la escuadra tras regatear previamente a un par de rivales.

En la segunda parte los asturianos no fueron capaces de cambiar la dinámica del encuentro. En lugar de encerrar a su rival en su campo con posesión, entraron en un peligroso correcalles en el que los de Víctor siempre se sintieron mucho más cómodos.

No solamente los defensores se impusieron siempre a los delanteros sino que además las mejores ocasiones fueron para los locales.

Champagne consiguió desviar un chut a la escuadra de Alejo poco antes de que Cifuentes aprovechara un contragolpe tras un saque de esquina para imponer su velocidad y superar a Champagne en su salida.

Partido finiquitado y victoria con toda justicia de un Málaga CF muy superior a partir del penalti inicial y en el que los de Egea nunca encontraron el camino al área rival a pesar de los cambios, con la entrada de Mossa y Toché y el recuperado Omar Ramos.

Un pundonoroso Oviedo lo intentó siempre y hasta el último minuto pero con graves deficiencias en la construcción y control del juego además de no acertar nunca con la finalización.

Con esta derrota el Real Oviedo se queda a cinco puntos del playoff con doce por jugar. Opciones matemáticas pero muy complicadas de cristalizar con éxitoy, más aún, con la imagen dejada hoy en La Rosaleda.

A los azules ya solo les vale la victoria en el próximo encuentro en el Carlos Tartiere que lo enfrentará al CD Numancia el domingo a partir de las 16:00h.