3,274 millones de euros. Ese es el valor exacto que el Oviedo le da a sus marcas, en poder del Ayuntamiento de la ciudad desde que el Consistorio se las compró en 2009 al club azul por 3 millones de euros. Por aquel entonces el Oviedo estaba en una situación económica muy negativa y alejado del fútbol profesional. La entidad azul entiende que en el escenario actual, con el club saneado, un máximo accionista potente como Carlos Slim y el objetivo claro de regresar a Primera División, sus símbolos deben volver a pertenecerle. Actualmente el club tiene que pagar un alquiler anual por los símbolos (60.000 euros al año era el precio del último convenio).
El tripartito que gobierna la ciudad (Somos, PSOE e IU) encargó una tasación el año pasado que puso valor las marcas: 4,8 millones de euros (desde el tripartito siempre recalcaron que el precio incluye el IVA). Esa cantidad supone una revalorización del 60% de su precio inicial. El club azul, que públicamente siempre ha mantenido silencio sobre el asunto de los símbolos, rechazó de plano ese precio por "excesivo" y decidió encargar una nueva tasación por su cuenta. El informe, que está en manos del Ayuntamiento desde el pasado 5 de abril, pone un nuevo valor a las marcas: 3,274 millones de euros, según ha podido saber LA NUEVA ESPAÑA de fuentes conocedoras de la tasación del club azul. La citada cifra supone 1,526 millones de euros menos que el precio que salió del Consistorio y 274.000 euros más de lo que el Ayuntamiento pagó en su momento por los símbolos y el dominio en internet, hace ya diez años.
Los técnicos municipales supervisan ahora la nueva tasación, en fase de alegaciones, para saber si el precio está justificado en base a la ley y poder darle luz verde, según apuntan fuentes municipales. Con las elecciones locales y autonómicas a la vuelta de la esquina, el domingo 26 de mayo, el asunto de las marcas del club tendrá que esperar hasta la formación de un nuevo gobierno en la ciudad para buscar una solución que satisfaga a las dos partes, club y Ayuntamiento.
La entidad azul mantiene reuniones con la mayoría de los grupos políticos de la ciudad. Pero salga quien salga de las urnas en ocho días ya tendrá encima de la mesa el valor que le da el Oviedo a sus símbolos. Está por ver si ese nuevo precio sería el definitivo para una posible compra o habría espacio para negociaciones. El tripartito, salvo Somos, que siempre rechazó la tasación del Ayuntamiento, recalcó en su momento que los 4,8 millones no era un precio vinculante y que ya en 2009 las marcas se valoraron inicialmente en 3,7 millones, aunque luego se vendieron por tres.
La tasación del Oviedo fue efectuada por la empresa Tasaciones Hipotecarias Renta, S. A. (Thirsa), con sede en Madrid. Los criterios para esta tasación, inferior a la del Ayuntamiento, no han trascendido. En la tasación inicial, a cargo de la empresa Dungarvan, se tenían en cuenta distintos factores relacionados con la evolución del club. El escrito citaba, entre otros, los siguientes: el número de abonados (más de 20.000 por aquel entonces), la distinción de club histórico, entre los quince equipos más importantes de España o los altos ingresos por la ropa vendida.
El informe también le otorgaba al club la clara posibilidad de crecer en el futuro, con el equipo luchando por volver a Primera División. Otro apartado era para el desarrollo económico del Oviedo desde que entrase en el accionariado el grupo mexicano Carso hace ya siete años, en 2012. Desde 2013 el grupo de Arturo Elías, yerno de Slim, controla las decisiones económicas y deportivas.
El club, en lo deportivo, consiguió el ascenso de Segunda B y busca la vuelta a Primera. En lo económico, una de las principales novedades llegó en noviembre del año pasado con el ansiado logro de la deuda cero. Ese es uno de los puntos claves respecto a las marcas. El club, con las arcas saneadas, quiere recuperarlas en propiedad a no mucho tardar y cree que el incremento del valor se debe, sobre todo, a la gestión de Carso. El pasado enero tuvo lugar el último capítulo público de las marcas, cuando el Oviedo rechazó la propuesta de cesión de seis años por 240.000 euros. El club siempre sostuvo que no movería ficha hasta que no tuviese su tasación. Ahora, las dos partes conocen el nuevo precio.
