El 31 de mayo de 2015 el Oviedo dijo adiós en Cádiz a una larga travesía alejado del fútbol profesional. Conseguir una entrada para el partido durante la semana fue misión imposible para muchos oviedistas, que vieron desde la distancia la gesta de los de Sergio Egea en el Carranza. Ainhoa Vázquez (Oviedo, 1986) oviedista de cuna, fanática del club, gritó en el ascenso del Oviedo desde Getxo (Vizcaya), a casi mil kilómetros de Cádiz. Ahí se frustró el otro posible ascenso, el del Vetusta de Iván Ania, que cayó en el play-off contra el Arenas. Y allí estaba Ainhoa, pegada a la cantera azul, como lleva haciendo los últimos nueve años. "Si el Vetusta y el primer equipo juegan a la misma prefiero ver al Vetusta", dice. Ainhoa es, sin duda, una "rara avis".
Es difícil encontrar a alguien, sin dedicarse profesionalmente al fútbol, que tenga un conocimiento tan exacto de la cantera del Oviedo. Sigue todas las categorías y conoce a todos los jugadores, desde alevines hasta el filial. Cada entrenador y cada jugador. "Son mis guajes", los bautiza. Esta campaña se recorrió más de 3.000 kilómetros en los partidos del Vetusta. Sólo falló en seis desplazamientos y estuvo en todos los partidos en El Requexón.
"Si hubiera sido adulta en la buena época de Eugenio Prieto me llamarían ´prietista´. La cantera es necesaria en estos tiempos. El fútbol es mas cercano, más limpio, cuando se cuenta con los de casa", recalca. Su seguimiento por el fútbol base, además, no se queda en el Oviedo. "Me considero del Athletic por como tratan a su cantera, es una envidia ver a un equipo con once jugadores propios".
Ainhoa, administrativa de profesión, dedica los fines de semana a seguir los partidos de las categorías inferiores. "Mi jornada empieza el sábado a las 10 de la mañana hasta el último partido del domingo". Ironiza sobre la intensidad de su pasión. Muchos se sorprenden. "Antes los padres de los jugadores me preguntaban que por quien venía o si era la pareja de algún jugador. Voy a muchos partidos en los que solo está la familia de los jugadores. Ya me conocen de sobra", recalca.
Ainhoa aplaude la gran temporada del Vetusta, "no he visto nunca un equipo tan competitivo", celebra la irrupción de Jimmy, "es un orgullo ver con los mayores a alguien a quien has seguido desde infantiles", a la vez que critica sin contemplaciones las pocas oportunidades que cree que tienen los canteranos en el Oviedo: "Jimmy llegó al primer equipo porque se alinearon los astros. La cantera no funciona y este año la gente la reclama más porque con la temporada del Vetusta hay más argumentos. A la cantera hay que quererla y trabajarla, llevo años sin ver un entrenador del primer equipo en El Requexón viendo el fútbol base. En la ciudad deportiva del Athletic tuve al lado a Garitano (entrenador del Athletic)", apunta.
También analiza el funcionamiento de El Requexón. "Hay cosas que no se entienden, el fútbol base tiene que estar para formar jugadores. Lolo (fichaje del Vetusta) tuvo un buen papel, pero jugaba en el sitio de Javi Mier, que es un activo joven del club", explica. Con una plantilla más corta, no es optimista pero sí espera poder ver a algún canterano en el primer equipo el año que viene. "Directivos de equipos de Segunda B en viajes se sorprendían con que Edu Cortina o Lucas no estuviesen ya con los mayores, espero que tengan su oportunidad. ¡Mis guajes se merecen todo!", replica con una sonrisa.
