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"Don Federico", con contrato hasta junio

El hombre de Carso "ficha" por el Oviedo, donde lleva tres meses, hasta junio por 50.000 euros

Fernando Corral, consejero, y Federico González, en El Requexón. MIKI LÓPEZ

Federico González Vega (México, 1948) sobre el papel, no tiene cargo alguno. Es un asesor del grupo Carso y llegó a Oviedo el pasado octubre, días antes del cese del antiguo director general Joaquín del Olmo, como jefe temporal, centrado en la parcela económica del club azul. "Vengo a poner orden, me quedaré el tiempo que haga falta", dijo en su única intervención hasta ahora ante los periodistas en El Requexón, en su primer día en la ciudad deportiva del Oviedo.

Tres meses después, en el Oviedo ya saben que hay "Don Federico" para rato (así se le conoce en los círculos del grupo Carso). El grupo Carso, según ha podido saber LA NUEVA ESPAÑA, pretende que el directivo mexicano se quede, al menos, hasta el final de la presente temporada.

De hecho, González ya ha firmado un contrato con el club azul con fecha en vigor desde el pasado 1 de noviembre, con duración hasta el 30 de junio, fin de la temporada 2019-2020. Según fuentes cercanas al Oviedo, el salario de González en el club azul se situaría en una cantidad cercana a los 50.000 euros anuales, una cifra inferior a lo que suelen ingresar la mayoría de directivos de primer nivel de clubes de Segunda División, pero que entra en la política de contención de gasto que está llevando a cabo el propio mexicano en la entidad. González está hospedado en un hotel de la ciudad cercano al Tartiere desde su llegada a Oviedo, el lugar habitual de concentración del equipo desde esta campaña, pero entre sus planes está encontrar domicilio fijo en la capital asturiana y quizá también traerse a su familia.

La llegada del mexicano a la cúspide de mando del club carbayón supuso un huracán interno en el Oviedo tras la salida de Del Olmo, que fue el máximo responsable de todas las parcelas de la entidad durante cinco años, desde su llegada en enero de 2014 como director deportivo. González, sin cargo, le ha sustituido de pleno, mientras que Jorge Menéndez Vallina, presidente, también ha ganado poder de decisión de un tiempo a esta parte. El mexicano es ingeniero químico, tiene ascendencia asturiana y lleva trabajando para el grupo Carso durante los últimos 19 años.

Su perfil es claramente financiero y su llegada al Oviedo, "imprevista", según él mismo dijo, se debe al descontento que Arturo Elías tenía con la gestión de Del Olmo, ("por eso no está aquí", dijo recientemente en una entrevista en la cadena Cope). La principal tarea de González desde su llegada ha sido auditar la economía del club azul. Al poco de aterrizar desveló una de sus consignas a los empleados y directivos del club: época de recortes. El mexicano impuso una contención del gasto que afectaba al día a día del club. Aunque su plano es financiero, González tampoco descuida el perfil deportivo. Él fue el principal impulsor del "casting del Marriot" junto con Vallina, cuando ambos se entrevistaron en Madrid con cinco candidatos a directores deportivos, aunque finalmente ninguno de ellos acabó en el cargo que ahora tiene Francesc Arnau. El mexicano también tiene contacto con muchas personalidades del fútbol español, como agentes de jugadores o responsables deportivos de distintos conjuntos de la categoría.

González, a su vez, fue informado de las conversaciones de César Martín y Vallina con Rubén Reyes, analista del Rayo, que llegó a tener un acuerdo con el Oviedo para ser el responsable deportivo, que finalmente se encontró con el escollo de Martín Presa, presidente del club de Vallecas. Ahora, con la llegada de Arnau, González puede centrarse en especial en las cuentas del Oviedo, que serán presentadas en la próxima junta de accionistas el 18 de diciembre -el mismo día del partido de Copa del Oviedo ante el Badalona- en la que se espera su asistencia.

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