Sus explicaciones son como su fútbol: directo. No es Saúl Berjón (Oviedo, 1986) un futbolista que se explaye en las respuestas. Va al grano. Por eso, sus palabras sobre la lesión que le ha mantenido fuera de los terrenos de juego desde la 14.ª jornada son concluyentes. "La lesión ha desaparecido", dice con naturalidad. Y de un plumazo se acaban las dudas con el estado del extremo.

La recuperación del extremo ha tenido como momento clave el paso por el quirófano. Ese momento que muchos futbolistas prefieren evitar con medidas más conservadoras ha sido el que ha permitido al extremo una más rápida recuperación. "No hemos ido ni rápido ni despacio. Hicimos lo que teníamos que hacer", responde Berjón. La sensación, sin embargo, es que solo la artroscopia ha permitido acelerar su recuperación.

El calvario de Berjón empieza la semana en la que el Oviedo recibe al Almería en el Carlos Tartiere. No trabaja durante la semana al mismo ritmo que sus compañeros. Sigue su plan. Rozada no quiere arriesgar y le sitúa en el banquillo ante el conjunto andaluz. Juega los últimos 30 minutos del empate disputado el 1 de noviembre. Y se espera que esté en condiciones de ayudar en Huesca. De fondo, un peligro: la visita del Sporting 15 días después del Almería.

La situación no mejora y el cuerpo técnico decide darle descanso en Huesca. Llega el Sporting la siguiente semana y se considera que lo mejor es no arriesgar. En el club, no hay dudas de que estará en el derbi.

Pero tampoco llega a la cita más especial. A pesar de que el mismo Berjón promete que hará lo posible por estar a punto para el duelo. Pero las pruebas durante la semana son negativas. Al futbolista le sigue molestando la rodilla por lo que se decide que lo mejor es descansar. Como en anteriores citas, el equipo nota su ausencia.

Y la situación no se aclara, con Berjón al margen del grupo, hasta que a comienzos de diciembre se opta por otra estrategia: se le someterá a una artroscopia en Madrid para limpiar la zona dañada. En total, Berjón ya se ha perdido 8 encuentros ligueros, en los que el equipo ha notado su ausencia, especialmente a la hora de encontrar un futbolista con capacidad de desborde y de resolver una jugada en un chispazo. Durante su larga ausencia, Yoel Bárcenas ha sido el encargado de ocupar la izquierda, con Borja como media punta y Sangalli de cliente habitual en la derecha. En los 8 partidos en los que el Oviedo ha jugado sin su capitán, el equipo ha logrado dos victorias, tres empates y tres derrotas.

La idea inicial tras la operación, asó lo reconoció ayer el propio Saúl, es que la recuperación se extenderá por dos meses. Pero los plazos se han acortado. Berjón está en condiciones, sin molestias, y su participación en el equipo solo depende de que adquiera el ritmo de competición adecuado.

Él ve las cosas con optimismo. "La lesión ha desaparecido. Ya no tengo molestia alguna. Como de momento no tengo dolores, estoy entrenando con confianza. Es normal que pueda tener algunas molestias ahora, pero me encuentro con confianza para dar lo mejor de mí", indica.

La última reflexión de la breve intervención del ovetense está dirigida a analizar qué sucede con el equipo. El tiempo de espera le ha servido al atacante para ver las cosas con perspectiva. "Yo al equipo lo veo bien, aunque es verdad de que da la impresión de que con poco nos hacen gol, como se vio ante el Málaga, en un partido en el que merecimos ganar", indica, antes de expresar su malestar con el estamento arbitral: "Hay alguna decisión arbitral que no nos ha ayudado; ojalá que algún día nos venga a nuestro favor".

Ahora, con el parón por la Copa como aliado, Berjón espera ayudar a que su equipo regrese a la senda de la victoria.