"Temporada de renovación, buena temporada". Es una reflexión manida en los despachos del mundo del fútbol que suelen repetir los directivos más veteranos. Cuando un futbolista acaba contrato, sostienen, siempre aprieta en busca de su mejor versión en el terreno de juego. Saúl Berjón (Oviedo, 1986), el capitán del club carbayón, está de dulce después de su vuelta a los terrenos de juego tras su larga lesión que le tuvo casi tres meses en el dique seco.
En los tres partidos en los que ha participado desde su regreso (Huesca, Girona y Albacete), el equipo no ha cosechado ninguna derrota y el extremo ha dado tres asistencias decisivas para que el Oviedo sume cuatro puntos y saque disimuladamente la cabeza de los puestos de descenso. La recuperada versión de Berjón, fijo en el extremo izquierdo para Javi Rozada, técnico del Oviedo, llega a tiempo en la peor temporada del club azul desde la vuelta a Segunda y en un año clave para el futuro capitán. Berjón finaliza su vinculación con la entidad el próximo mes de junio tras renovar por objetivos la temporada pasada, cuando Michu ocupaba la secretaría técnica y Joaquín del Olmo supervisaba las operaciones.
La intención de la dirección deportiva al inicio de la temporada era renovar a Berjón, aunque en ningún momento se habló de la duración del nuevo contrato. Se daba por hecho el entendimiento debido a la buena relación que tenían ambas partes. Con Francesc Arnau al frente de la dirección deportiva, el desenlace, salvo giro imprevisto, será el mismo que tenía pensado Michu: Berjón plasmando su firma en el que podría ser su último gran contrato como futbolista. El ovetense no lo ha ocultado cuando se le cuestiona. Quiere retirarse en el Oviedo, el equipo de su ciudad.
En mayo cumplirá 34 años y, como dijo recientemente en una entrevista en la RTPA, se ve jugando unos tres años más al máximo nivel. En el club dan por hecho que lo hará en el Oviedo. Arnau habló públicamente de su situación en la comparecencia destinada a analizar el mercado de invierno y reconoció los primeros contactos, pero antepuso la "delicada situación deportiva", que tiene al Oviedo vagando por el descenso. En las conversaciones privadas, los derroteros han ido por el mismo camino. El propio Berjón hace semanas, al poco de incorporarse Arnau, preguntó al director deportivo sobre su situación. Este le transmitió calma con la misma, pendiente del rumbo del equipo, aunque le hizo saber lo importante de Berjón en el grupo. Durante los próximos meses ambas partes, club y jugador, tendrán que reunirse para tratar todos los detalles. También está prevista una reunión durante este mes con Christian Fernández. Al igual que sucede con Berjón, la idea de Michu también era renovar al cántabro, que cumplió 34 años el pasado octubre.
