Los cálculos del Oviedo se cumplieron a la perfección. Javi Rozada, entrenador azul, no podrá sentarse en el banquillo carbayón hasta dentro de tres semanas. La Federación Española de Fútbol confirmó ayer la sanción de tres partidos al ovetense tras su expulsión contra el Rayo Vallecano en Vallecas el pasado domingo en el empate del Oviedo (1-1).

El entrenador se perderá los encuentros ante el Alcorcón (en el Tartiere), el Lugo (en el Anxo Carro) y el Tenerife (en el Tartiere) y volverá en el partido ante el Extremadura a domicilio. Rozada fue expulsado en Vallecas tras protestar el penalti señalado en contra del Oviedo, a instancias del VAR, por una mano de Lolo en el área que supuso el gol del empate definitivo de los de Paco Jémez en su estadio.

El árbitro, el canario Trujillo Suárez, recogió los hechos en el acta del partido de esta forma: "En el minuto 73, el técnico Javier Fernández Rozada fue expulsado por el siguiente motivo: entrar dentro del terreno de juego, con el juego detenido, protestando de forma ostensible con los brazos en alto y lanzando una botella de plástico que portaba en su mano contra el suelo, siendo sujetado por miembros de su club tras ser expulsado".

Es la segunda expulsión del ovetense en Segunda División en su primer año en el fútbol profesional. Rozada ya fue sancionado con dos partidos tras sus protestas en el encuentro ante el Racing de Santander en el final el encuentro. El técnico se disculpó por el incidente en Vallecas en la rueda de prensa posterior. Javier Benavides, segundo técnico de Rozada, será el encargado de sentarse en el banquillo en los tres próximos partidos.

Al ovetense ya le tocó hacer de primer entrenador en los encuentros del Oviedo ante el Málaga en el Tartiere y el Almería en el estadio Juegos Mediterráneos. Un empate y una derrota para el conjunto azul como bagaje.