Al Oviedo le toca hoy (18.15 horas) recibir a un mal inquilino. El Alcorcón se encuentra más cómodo cuando juega fuera de su campo que cuando lo hace en Santo Domingo. Al menos eso dicen las cifras. El conjunto madrileño es el único de Segunda que no ha perdido ningún partido a domicilio, con tres victorias y diez empates que le han permitido sumar diecinueve puntos lejos de su campo. El Alcorcón lleva en total treinta y cuatro puntos, por lo que en su campo tan solo ha conseguido quince. Las cifras del Alcorcón a domicilio superan a las del Oviedo en casa. Los azules llevan esta temporada diecisiete puntos sumados en el Tartiere (tres victorias, ocho empates y dos derrotas), dos menos que los madrileños fuera.
Una de las grandes fortalezas del Alcorcón cuando juega a domicilio es su solidez defensiva. Los madrileños son el equipo que menos tantos (10) recibe como visitante. Una de las claves en el equipo de Fran Fernández es que se encuentra muy cómodo cuando es el rival el que lleva el peso del partido y el que tiene que tomar la iniciativa ofensiva para marcar. En esa circunstancia, el Alcorcón sabe colocarse bien en el campo, sin sufrir en exceso. El Oviedo, por su parte, es todo lo contrario. Los azules son, con treinta y nueve, los que más goles han recibido junto al Lugo. De ellos, en el Tartiere les han hecho quince en trece partidos.
Lo curioso del Alcorcón es que cuando juega en casa cambia todo. No en vano, de ser el equipo que menos goles recibe a domicilio pasa a ser el segundo al que más le marcan como local. Lleva veinte goles en contra en los catorce partidos que ha disputado en Santo Domingo. Tan solo el Lugo, con veintitrés, está por debajo.
El desafío del Oviedo hoy es mayúsculo. El Alcorcón se mantiene en un puesto cómodo de la clasificación precisamente porque es fuerte lejos de su campo. Si, como es habitual, el Alcorcón tuviera peores números a domicilio que en casa estaría hundido en puestos de descenso. Pero lo que estropean en casa lo arreglan fuera. Es cierto que esa fortaleza se ha basado, sobre todo, en su capacidad para mantener los encuentros equilibrados, con diez empates, cuatro de los cuales han llegado en partidos en los que no hubo goles.
Una muralla que deberá derribar el Oviedo para conseguir tres puntos que son fundamentales para el equipo de Javi Rozada tanto para seguir fuera de los puestos de descenso como para involucrar al Alcorcón en la pelea por la permanencia. Una victoria colocaría a los azules a tan solo dos puntos de los madrileños, que ahora son decimocuartos en la tabla. Una buena ocasión, además, para hacer del Oviedo un equipo que cuenta con el Tartiere como una de sus principales fortalezas. Los azules llevan tres jornadas sin perder en casa, la última con victoria por 3-1 ante el Albacete, y convertirse en el primer equipo que gana al Alcorcón a domicilio, supondría un subidón de moral y sería la mejor forma de alargar una racha que debe llevar al Oviedo a la permanencia.
