La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ortuño hace de "coach"

"Hay que generar un ambiente positivo; hay que crear ilusión", señala el delantero del Oviedo

Ortuño, en el partido ante el Rayo Vallecano. MIKI LÓPEZ

Llegados a este punto, influye lo futbolístico y algo más. El aspecto anímico adquiere un peso importante. Ya no se trata solo de escoger a los buenos futbolistas. También, de elegir a jugadores capaces de lidiar con un ambiente de presión. Tener la mente despejada es siempre una ventaja. Y Alfredo Ortuño, al menos de palabra, demuestra tenerlo claro. No se trata de un castigo, la pelea por la salvación puede verse como un premio. "Hay que generar un ambiente positivo. Hay que crear ilusión", defiende el delantero.

El murciano pone un ejemplo de cómo cree que debe llevar el equipo la situación. "Si fuéramos terceros y tuviéramos que ganar 7 partidos para subir, todos lo veríamos como un reto muy bonito. Esto es lo mismo. Son los mismos rivales y el mismo objetivo, aunque la situación sea diferente. Si logramos olvidarnos de la clasificación será un reto bonito", indica ante los medios.

Para Ortuño, la situación no es nueva. El año pasado, sin ir más lejos, le tocó lidiar con un escenario similar. El atacante llegó en la segunda vuelta a un Extremadura con problemas clasificatorios. Los azulgranas lograron salvarse con un final excelente. Lograron ganar 7 de los últimos 10 encuentros ligueros, para finalizar la campaña en una cómoda 13.º posición, con ocho puntos de colchón sobre el Rayo Majadahonda, el primero de los conjuntos descendidos.

"Rozada me ha peguntado por la experiencia del Extremadura de la temporada pasada. También viví algo similar con el Girona hace algunos años. A clave es generar buen ambiente y que no se tome por fracaso tener que pelear por no descender", expone Ortuño. "Es un reto para aprender y para crecer. Para que el club sea más fuerte", incide el delantero en la misma idea.

Ortuño ha ido a lo largo del curso uno de los futbolistas imprescindibles en los onces azules. Lo fue para Egea y, después, para Rozada. Pero la irrupción goleadora de Ibrahima, aprovechando su ausencia por contrato contra el Albacete, le ha relegado a la suplencia en los duelos ante el Rayo Vallecano y el Alcorcón. Ante el conjunto alfarero, el murciano ingresó en el segundo tiempo para, desde el punto de penalti, regresar a la senda goleadora diez jornadas después. Para registrar un tanto del ariete que no sea desde el punto de penalti hay que remontarse a la 12.ª fecha liguera, cuando los azules se impusieron por 4-2 al Girona, con doblete de Ortuño.

"Yo me encuentro muy bien. Cuando firmé por el Oviedo sabía que no iba a jugar los 42 partidos, soy consciente de que eso es muy difícil. Pero debo seguir en mi línea de trabajo. Estoy centrado en el equipo y muy ilusionado", asevera el delantero azul.

De cara al duelo de Lugo, el Oviedo pone en liza algo más que tres puntos. Enfrentarse a un rival directo hace que el ambiente se caldee. Sin embargo, Ortuño trata de relativizar el encuentro del domingo: "Una final es cuando te juegas un título, no esto. Sé que es importante, que es un rival directo con los mismos puntos y con el golaverage en juego. Podrías sumar casi cuatro puntos y un empujón moral".

Compartir el artículo

stats