Lunin, portero del Oviedo, tiene el reto de conseguir que su equipo vuelva a acabar un partido sin recibir goles, algo que no sucede desde el derbi asturiano, que tuvo lugar en la decimosexta jornada. El meta ucraniano, que tuvo unas molestias esta semana que le dejaron un par de sesiones sin entrenarse en El Requexón, debe confirmar sus buenas prestaciones completando un choque sin tener que recoger el balón del fondo de la portería.

El Oviedo es el equipo que más goles recibe de la categoría, con 42, los mismos que le han hecho al Deportivo de La Coruña, siendo esa una de las grandes debilidades del conjunto azul esta campaña. Un buen trabajo defensivo, unido a la seguridad que ha demostrado Lunin desde que fue fichado en el mercado de invierno, debe servir para que la sangría defensiva pare y el Oviedo pueda empezar a sumar con más facilidad, sin tener que conseguir más de un gol para hacerlo.