Lucas Ahijado fue la novedad en el once de Ziganda, en una situación que no era sencilla de afrontar: tras pasar parte de la temporada en el ostracismo y estar muy cerca de abandonar el club en el mercado de invierno (el Burgos de Michu intentó su llegada hasta el final), el viernes le llegó la oportunidad por la lesión de Juanjo Nieto. El canterano fue de menos a más y fue destacado en la sala de prensa por Ziganda, que alabó su predisposición y la amplitud que le había dado al equipo. "Mis sensaciones personales no fueron malas, pero todavía puedo mejorar y para eso trabajamos", indica horas después de su tercera presencia en el once inicial del Oviedo esta campaña. Curiosamente, la primera también había sido ante la Ponferradina.

"Yo trabajo todos los días para ganarme el puesto y cuando no me ponen tengo que seguir esforzándome para tener mi oportunidad", explica el lateral, antes de analizar el partido: "Estuvimos sólidos en defensa. Nos crearon algunas ocasiones pero las supimos solucionar. En ataque es cierto que nos faltó un poco más pero ya trabajamos para mejorarlo".

Lucas se enfrenta ahora a su gran oportunidad para consolidarse en el equipo. La lesión de Lucas se alargará varias semanas por lo que el canterano tiene abiertas las puertas de la titularidad en la fase decisiva de la temporada.