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El Oviedo prepara un reajuste de los salarios del primer equipo

La entidad quiere liberar masa salarial para confeccionar la plantilla del próximo curso l Ibra y Champagne no seguirán el año que viene

Champagne, con Lunin. F. RODRÍGUEZ

El Oviedo ya está manos a la obra para diseñar el equipo de cara a la próxima temporada tras amarrar la permanencia. Pero antes de acometer los fichajes que vendrán, la dirección deportiva azul se está ocupando de aclarar el futuro de los jugadores de la plantilla actual. El Oviedo, según ha podido saber LA NUEVA ESPAÑA, quiere reestructurar los contratos de los jugadores de la primera plantilla y de categorías inferiores. La entidad revisará todas las situaciones contractuales de los jugadores del primer equipo y en muchos casos apostará por un reajuste de las fichas a la baja para planificar el mercado para liberar límite salarial de cara a la confección de la nueva plantilla.

Para sacar adelante su plan, el Oviedo se verá obligado a sentarse a negociar y que los jugadores con contrato en vigor den su visto bueno. Francesc Arnau, director deportivo de la entidad carbayona, a instancias de Arturo Elías, es el encargado de acometer las negociaciones. Además, el Oviedo ya le ha comunicado a Ibra y a Champagne, ariete y portero respectivamente que finalizan contrato, que no entran en los planes de la entidad.

Ibrahima Baldé, delantero senegalés de 30 años, dirá adiós al club azul tras dos campañas en el Oviedo y diez goles en su casillero anotador. El ariete fue una incorporación impulsada por Ángel Martín González, exsecretario técnico y actualmente director deportivo del Getafe. Ibra, tipo muy querido en el vestuario, nunca llegó a ser titular indiscutible con los cuatro entrenadores que ha tenido hasta el momento (Anquela, Egea, Rozada y el Cuco), aunque con el técnico navarro sí que tuvo más protagonismo que con Egea y con Rozada y fue incluso titular en partidos importantes, como el derbi en El Molinón.

Su salida ya estuvo cerca de darse el pasado verano, ya que el Oviedo le trasladó que sería el cuarto delantero del equipo. No obstante, el ariete siempre sostuvo que estaba feliz en el club y que apostaba por acabar su contrato (también lo dijo en el pasado mercado de invierno cuando se reunió con Arnau). En dos temporadas, Ibra ha jugado un total de 59 partidos con el Oviedo, y fue titular en 18 de ellos. Pese a ello, consiguió anotar un total de diez tantos (seis la campaña pasada y cuatro en la que acaba de concluir).

El caso de Nereo Champagne, argentino de 35 años, es distinto al de Ibra. El veterano portero, que vino al Oviedo procedente del Leganés, de Primera División, tuvo un papel importante en la campaña pasada a las órdenes de Anquela y de Egea y le ganó el puesto a Alfonso, portero titular. En este curso, al igual que en el anterior, el joven portero también empezó de titular y Champagne recobró la confianza de Egea. No obstante, Arnau entendió a su llegada que la portería era una de las líneas a reforzar y consiguió la cesión de Lunin, por lo que Champagne perdió protagonismo. El argentino, uno de los capitanes de la plantilla precisamente en la campaña que acaba de concluir, dirá adiós al club azul tras 47 partidos disputados con la zamarra carbayona. Ibra y Champagne no son los únicos que abandonarán el club azul esta campaña. Arnau se reunió ayer con varios jugadores, coincidiendo con la realización de los tests por coronavirus, y les comunicó los planes del club para la temporada que viene.

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