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La operación Borja, al ralentí

El Oviedo se ha reunido ya tres veces con el agente del jugador, que cobra el mínimo en Segunda y espera una mejora de contrato

Borja, con el balón, entre Garrido y Sergio, en el partido ante el Cádiz. M. L.

Ya van tres reuniones para tratar el tema. Hay buena sintonía, conversaciones amistosas y sensaciones positivas, pero ninguna oferta concreta. Lo que significa que, para el Oviedo la "operación Borja Sánchez" parece no correr mucha prisa. El club azul se ve con tiempo de sobra para poner al día la situación contractual del canterano -mejorarle la ficha y la cláusula de rescisión principalmente-, uno de los asuntos del verano a tratar por la dirección deportiva. Tiempo queda, pero las negociaciones, que llevan abiertas ya incluso desde antes de acabar el curso, dan ya indicios de estar en punto muerto. Y el jugador sigue esperando. De momento, la operación va al ralentí y para largo.

De hecho, y desde que finalizó la temporada, el Oviedo ha tenido al menos tres encuentros con el representante del jugador para tratar el futuro de Borja sin que haya habido fumata blanca en ninguno de ellos. Para despejar la situación de los hermanos Jorge y Javi Mier -tienen el mismo representante que Borja- y la de Obeng, bastó con un breve encuentro y dos llamadas.

Las reuniones para aclarar el futuro de Borja en el Oviedo van a otro ritmo. Según fuentes conocedoras de las negociaciones, éstas han sido amistosas, con buena predisposición por ambas dos partes, pero sin nada sólido a lo que agarrarse. Las posiciones del club y del jugador son claras. Borja, que tiene contrato hasta 2022 y una cláusula de rescisión de tres millones, no ve otro camino que seguir en el Oviedo, siempre y cuando su contrato sea revisado y adaptado. El ovetense, una de las sensaciones del curso tras subir desde el Vetusta al primer equipo, cobra el salario mínimo de Segunda (77.500 euros anuales) más pluses como el número de goles o de partidos jugados. El agente de Borja (Juan Mata, el padre del jugador del Manchester United) ha recalcado en esos encuentros la voluntad del jugador de seguir vistiendo de azul, pero también ha recordado el "esfuerzo" que realizó Borja al regresar a la entidad y enrolarse en las filas del Vetusta en 2017, por aquel entonces en Tercera División, pasando a cobrar un salario notablemente más bajo que el que percibía en el Real Madrid.

El Oviedo ha mostrado interés en ampliar los años de contrato y también la cláusula, pero de momento nada se ha hablado de salario, asunto fundamental para el jugador. Y Borja es un jugador muy apetecible en el mercado. Por la situación del futbolista han preguntado varios equipos españoles y también alguno del extranjero, aunque de momento nada se ha plasmado en una oferta por el jugador, precisamente por el deseo de Borja de seguir creciendo en Oviedo.

A favor del Oviedo juega un factor, determinante en la industria del fútbol, como es la buena relación y sintonía entre el agente de Borja y Arnau, viejos conocidos en el mundo del fútbol con varias operaciones juntos a sus espaldas, tanto en el Málaga como en el Oviedo.

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