Alejandro Arribas fue el encargado de hacer ayer una primera valoración del calendario que se sorteó el lunes en la Federación Española de Fútbol. La única pega que le pone el futbolista madrileño es que les haya tocado el derbi en el Tartiere en la primera vuelta, el 11 de octubre, fecha en la que muy probablemente no podrá acceder público al campo: "Esperemos que dentro de poco tiempo pueda haber público en los campos, que es la esencia del fútbol, y ojalá que el derbi hubiese tocado en la vuelta, para que la afición hubiera podido ayudarnos". Por lo demás, Arribas celebra que el primer partido, a pesar de no tener público, sea en casa: "Es bueno para el equipo, empezar en casa y hacerlo ganando es importante", dijo sobre el duelo ante el Cartagena. Eso sí, advirtió Arribas del peligro de los equipos recién ascendidos: "Los equipos que ascienden vienen en una buena dinámica y suelen ser difíciles, llegan con jugadores que a lo mejor no se conocen tanto, pero nosotros debemos centrarnos en lo nuestro. El equipo sea el rival que sea, va ir a por los tres puntos", añadía. Un Oviedo que quiere ser, según señalaba Arribas, "sólido": "Buscamos que el equipo sea sólido, tener ese nivel que tuvimos después del confinamiento". Un Oviedo en el que Arribas está llamado a ser uno de los líderes de la defensa.
