Una temporada tranquila y luego ya veremos. Francesc Arnau, director deportivo del Oviedo, desgranó ayer en 28 minutos un mercado de fichajes que para los azules ha tenido un poco de todo. Lo último, la firma del Yoel Bárcenas por el Girona en calidad de cedido. El extremo panameño, ya ex del Oviedo, era uno de los objetivos de la dirección deportiva y Arnau habló ayer sobre el desenlace fallido para los carbayones. "Teníamos un acuerdo con su club (el Cancún) para que estuviese aquí traspasado, pero no pudimos firmarlo. Imagino que Yoel quería ir a otro club y fue imposible", indicó Arnau, que además desveló que también se llegó a apostar por su cesión, "el jugador cambió de agentes y no alcanzamos un acuerdo con él. Esperamos hasta cierto punto y no pudimos hacerlo".

Con Saúl Berjón, otro extremo que ha perdido el Oviedo este verano, la situación fue diferente. El club le ofreció renovar a la baja y Berjón no aceptó. Arnau lo explicó así: "Con Saúl siempre me quedó la impresión que las dos partes podíamos haber hecho más y tengo máximo respeto por su carrera en el Oviedo". Preguntado sobre si visto el desenlace del mercado se arrepiente de no haber atado al ovetense, el catalán es pragmático. "La plantilla de ahora es la que es, no voy a pensar en si Saúl estuviese o no. No llegamos a un acuerdo y no está, mi respeto es total", zanjó. ´

Respecto a la plantilla configurada, Arnau dijo tener "un nivel de satisfacción óptimo" y además quitó hierro a la escasa participación de Cedric y Mujica, dos de las incorporaciones de esta temporada que de momento no cuentan para Ziganda. "Están dentro de la plantilla y el entrenador elige a los que mejor ve. No hay etiquetas para los futbolistas", dijo Arnau, que a lo largo de la comparecencia le echó varios capotes al Cuco Ziganda.

El catalán justificó a su vez la tardanza en la inscripción de Blanco Leschuk, "son temas burocráticos y una ampliación de capital lleva su tiempo" y también admitió que las buenas prestaciones de Lucas como lateral izquierdo enfriaron un fichaje más en esa posición: "Decidimos apostar por lo que tenemos". No obstante, Arnau sí desveló que hasta el último momento el Oviedo estuvo abierto a un fichaje que viniese "para ser titular, y no de relleno, en la línea de lo que dijo el Cuco". De la comparecencia de Arnau queda claro, pues, que el Oviedo tiene todavía cierto margen salarial para acometer al menos una operación en el mercado de invierno. Más aún cuando Arribas, Tejera, Mossa, Gripo, Rodri, Carlos Hernández y Sangalli ya han aceptado la reestructuración de sueldos del club. "Veremos", dijo Arnau.

Respecto a la continuidad de Diegui, otro revés para Arnau, el director deportivo arropó al jugador, dijo que será uno más y explicó la operación fallida. "Con Diegui nos encontramos muchas dificultades. Depende del mercado. Nos ha perjudicado el hecho de que el covid-19 haya cerrado fronteras y que los clubes de Segunda B tuviesen menos dinero. No le encontramos salida y no es culpa de nadie".

Sobre el objetivo del equipo, por lo dicho por Arnau la palabra "ascenso" sigue estando prohibida en las oficinas del Tartiere. "El objetivo nos lo tenemos que ganar en el día a día. Sabemos cómo es la Segunda, si queremos pelear por algo grande tenemos que demostrarlo", recalcó para más tarde matizar, "queremos afrontar una temporada tranquila e incluso pelear por algo más". Arnau, que agradeció en todo momento la ayuda de todos los estamentos del club durante el mercado, cerró su intervención mostrando optimismo de cara al derbi. "Aunque el Sporting esté por delante, en los derbis no importa. Todos empezamos con tabla rasa y desde cero. Tengo confianza en este equipo y aunque el Sporting esté líder estoy convencido de que le vamos a plantar cara y vamos a ganar".