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Cuando Nieto era el “Dinamita”

El lateral azul se formó en el Castellón como delantero

Juanjo Nieto

Puede sorprender, pero hubo un tiempo no muy lejano en el que Juanjo Nieto (Castellón, 26 años) no corría la banda ni doblaba a su extremo. En vez de poner centros, los remataba. Como mucho, se retrasaba a la media punta, pero de ahí no bajaba. Defender, lo justo. Nieto era el clásico hombre de ataque con calidad y gol. Así, de delantero, brilló durante toda su juventud y triunfó en el Castellón, donde llegó a jugar en Tercera tras pasar por las categorías inferiores. Metiendo goles y dando asistencias Nieto llamó la atención de varios equipos del panorama nacional. Sus ídolos en aquellos tiempos eran Xavi y Ronaldinho. De Cafú o Dani Alves, históricos laterales en lo que se fijan muchos jóvenes carrileros, ni hablar.

Nieto metía goles como churros e incluso hizo pruebas con el juvenil del Valencia. Fue finalmente el filial del Valladolid el que lo reclutó para mejorar su ataque. Estaba en Segunda B. “Dinamita”, lo bautizaron en Pucela. Todo iba bien en la vida del entonces atacante hasta que Rubén de la Barrera, ahora técnico del Viitorul Constanta rumano, se cruzó en su vida. Era la temporada 2014-15. El técnico, estilo peculiar el suyo, llegó al filial del Valladolid y Nieto no le convenció desde el primer momento. Un día le puso de lateral para completar un partidillo de entrenamiento. Simple relleno para cuadrar los equipos. Nieto se pilló un buen rebote, pero De la Barrera le dijo que o jugaba ahí o no sería profesional. No se equivocó. Ahí se quedó Nieto. Aunque costó.

Esa temporada solo jugó 16 partidos y luego volvió a Tercera, al Atlético Baleares. Dicen sus cercanos que en ese momento estuvo muy cerca de dejar el fútbol. El fútbol da tantas vueltas que hoy y ahora Nieto es el lateral derecho del Oviedo y un jugador con muy buen cartel en esa posición en la categoría. Esta tarde vive un partido especial, ante el equipo de su ciudad en el Tartiere. El mismo equipo que un día, siendo un chaval, dejó para regresar al Rafalafena, el club de su barrio, y volver a jugar con sus amigos.

Lo que hoy quiere Nieto es triunfar en el Oviedo y llegar a Primera División. Dicen sus cercanos que tiene ese reto metido en la cabeza. También dicen que se propone dar, al menos, cinco asistencias de gol. El sábado pasado ante Las Palmas dio la primera tras una jugada por el centro, su preferida. Parecida a las que hace Jesús Navas, el que es ahora uno de los referentes del que un día fue el “Dinamita”.

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