El Oviedo empató esta noche en el Tartiere ante el Fuenlabrada (1-1) en un disputadísimo partido que se decidió por detalles. El Oviedo aprovechó su único tiro de la primera parte para ponerse con ventaja y el Fuenlabrada empató tras un discutido penalti al arrancar la segunda. Los azules, que no perdieron la cara al partido, jugaron con diez jugadores más de veinte minutos por la expulsión de Leschuk en una jugada mal calculada por el ariete, que hizo una falta innecesaria teniendo amarilla.  

La primera parte fue un toma y daca en lo físico. Un encuentro muy trabado y la constatación para el Oviedo de que jugar ante el Fuenlabrada no iba a ser el paseo del día del Castellón. El equipo de Sandoval es el típico equipo que fastidia, que presiona alto y que va al choque. Aceptó el envite el Oviedo, seguro en el cuerpo a cuerpo y además con cierta suerte. El Fuenlabrada tuvo varias ocasiones claras en la primera parte, pero la fortuna no le sonrió. La tuvo Mula en el 16 tras una mala salida de Femenías y un error de cálculo de Christian. Le quedó el balón muerto y de forma inexplicable disparó fuera. Iban Salvador tuvo otra en el veinte con un tiro que también se fue fuera. Respondió el Oviedo, feliz con espacios, con una buena cabalgada de Borja que acabó en córner. Kanté volvió a avisar en el 37, pero Nahuel desniveló el choque justo antes del descanso. El argentino tiró fuerte desde fuera del área tras una buena combinación con Borja y Rosic estuvo muy blando. El balón acabó en la red y el Oviedo, con muy poco, se iba con un 1-0 al descanso. 

La segunda parte arrancó con el mismo guion del partido, aunque a los tres minutos Borja tuvo el 2-0 tras otra jugada con espacios. El 10 decidió mal y su mano a mano se fue fuera. Acto seguido tuvo otra el canterano tras un rechace en un tiro de Nieto, aunque la jugada se anuló por fuera de juego. El Oviedo con espacios imponía. Pero el Fuenlabrada encontró su jugada. Carlos pugnó con Kanté en el área y el árbitro señaló penalti tras el contacto. El jienense reclamó que había tocado balón y el VAR no intervin0. El propio Kanté transformó la pena máxima. Era el minuto 55. El partido volvía a su fase inicial, pero se desniveló tras la expulsión de Leschuk, que llegó tarde a una disputa y le dio una patada Juanma. Tenía amarilla y vio la segunda. El Oviedo, pues, afrontaba la fase final del partido con un hombre menos y todo por decidir. Quedaban más de veinte minutos y el Oviedo se echaba un paso atrás. Obeng entró por Borja para intentar cazar alguna por velocidad, pero el partido finalizó con empate.