Blanco Leschuk reanimó al Oviedo en Alcorcón. Un gol del argentino, cuando llevaba ocho minutos en el campo, evitó un descalabro del Oviedo ante uno de los rivales directos en la lucha por la permanencia. Hacía trece partidos que Blanco Leschuk no marcaba, incluso perdió la titularidad, pero el de ayer vale su peso en oro para evitar complicaciones.
Al técnico del Oviedo, José Ángel Ziganda, le volvió a entrar un ataque de inspiración y quiso dejar de nuevo, como sucedió en la primera vuelta en el partido ante el Leganés, su sello en el once inicial con un once revolucionario, con ocho cambios con respecto al equipo que empató ante la Ponferradina. Y a punto estuvo de cosechar un gran fiasco y meterse en un problema mayúsculo. Los azules salieron dormidos y ya perdían en el primer minuto. No aparecieron por el campo hasta que Rodri dispuso de la primera ocasión, en el minuto 18, y a partir de ahí el partido se igualó.
En la segunda mitad, los azules fueron muy superiores, sobre todo a raíz de la entrada al campo de Sangalli, Nahuel y Tejera, ante un Alcorcón muy justo y que sólo se dedicó a defender su ventaja. Aguantó hasta casi el final cuando Blanco Leschuk rescató un punto que hacía justicia para los azules. Es otro empate, el tercero consecutivo de los oviedistas –ya son los reyes de las igualadas, con 15–, pero el equipo da para poco más.
Ziganda hizo una revolución en el once, con ocho cambios con respecto al equipo que empató el sábado en la Ponferradina. Solo se mantuvieron en el once Femenías, Arribas y Edgar, mientras que el Alcorcón sólo realizó uno, el de Víctor García por Laure, con respecto al equipo que empató en El Molinón.
El Oviedo volvió a salir dormido, igual que sucedió hace tres días en el Tartiere y lo pagó. Apenas se llevaba un minuto de juego cuando en la primera jugada ofensiva del Alcorcón, tras un saque de banda y un centro desde la banda derecha de Víctor García que no despejó bien la zaga azul y que tampoco defendió la zona de rechace, el balón le cayó al nigeriano Nwakali, que con un disparo raso desde fuera del área batió a Femenías.
El gol asustó al Oviedo, que estuvo los primeros diez minutos fuera del partido. Sin dar una a derechas, ante un Alcorcón que ganaba todas las segundas jugadas y además tenía el control del partido. El Oviedo, todo lo contrario. Los azules cometían muchas imprecisiones con el balón y les costaba un mundo progresar.
LAS NOTAS
Femenías
APROBADO
Apenas tuvo trabajo. En el gol encajado no pudo hacer más.
Diegui
APROBADO
A pesar de su falta de ritmo estuvo bien, en especial en la segunda mitad.
Carlos Hernández
APROBADO
Regresó al once inicial y cumplió en un partido
poco exigente.
Christian Fernández
APROBADO
Estuvo acertado en las pocas acciones en las que intervino.
Arribas
APROBADO
Cumplió en los minutos en
los que estuvo en el campo.
Lucas
SUSPENSO
No estuvo acertado en
varias acciones defensivas.
Edgar
APROBADO
Con más criterio con el balón que en partidos anteriores.
Jimmy
SUSPENSO
No entró bien en el partido, con muchas imprecisiones.
Obeng
APROBADO
Estuvo activo y dispuso
de varias ocasiones.
Rodri
SUSPENSO
Salvo un remate en la primera mitad, estuvo desaparecido los minutos que jugó.
Nahuel
NOTABLE
Su entrada dio otro
aire al Oviedo.
Tejera
APROBADO
Tuvo varios detalles de
calidad con el balón.
Sangalli
APROBADO
Aportó movilidad y
criterio con el balón.
Blanco
APROBADO
Estuvo bien y además
marcó el gol.
Borja Valle
APROBADO
Aprovechó sus minutos.
Sin embargo, en el minuto 18, el conjunto azul dispuso de la mejor y única ocasión clara para empatar el partido, pero el disparo de Rodri, tras peinar el balón en primera instancia Edgar, fue sacado sobre la línea por Javi Castro en dura pugna con Obeng. Parecía que esta acción iba a meter a los azules en el partido, pero fue un espejismo, ya que seguían sin generar juego por el interior y además carecían de profundidad por las dos bandas, aunque Lucas se esforzaba por la izquierda, con más ganas que acierto.
El juego embarullado y con continuas imprecisiones le favorecía a un Alcorcón que estaba cómodo en el campo, aunque en el minuto 39 los azules le volvieron a dar otro susto en una acción en la que Obeng le ganó la acción a José Carlos y acabó en la red, pero que fue anulada por fuera de juego del jugador ghanés.
En la segunda mitad, el Oviedo mostró otra cara. Los azules fueron más intensos, llevaron el control del juego y comenzaron a crear ocasiones ante un Alcorcón que se limitó a defender su ventaja, sin más.
Obeng dispuso de una ocasión clara para empatar el partido en el minuto 53, pero llegó muy forzado y envió el balón fuera. La presión del Oviedo se acentuó cuando Ziganda optó por dar entrada en el campo a Sangalli, Nahuel y Blanco Leschuk, en un triple cambio, que aceleró al Oviedo, mientras que el Alcorcón no daba ninguna respuesta y se limitaba a defender su ventaja en el marcador y no cometer errores en defensa.
Sin embargo, los madrileños no resistieron el acoso azul, y Blanco Leschuk, a siete minutos del final, tras una jugada que inició Diegui, con centro final de Javi Mier, le ganó la partida a León y cabeceó el balón a la red.
El Oviedo no se paró y siguió insistiendo en busca del tanto de la victoria ante un Alcorcón que estaba grogui. Javi Mier tuvo la última ocasión ya en la prolongación, pero el balón se marchó fuera por muy poco.
Al final, los azules acumulan otro empate, el tercero consecutivo, en un partido en el que mostraron dos caras y que estuvieron a punto de perder por culpa de un desastroso inicio de partido.