El Oviedo juega esta tarde en Ibiza (16.00 horas, Movistar) con el reto de prolongar su momento dulce en la temporada, conseguir la tercera victoria consecutiva y afianzarse en los puestos de play-off de ascenso. El equipo azul, quinto, no logra tres triunfos seguidos desde hace más de un año cuando superó a Las Palmas, Castellón y Zaragoza a finales de octubre de 2020.
El equipo del Cuco, tras tumbar al Huesca y al Cartagena, aspira a igualar la marca ante un rival, el Unión Deportiva Ibiza, que todavía no conoce la derrota en su estreno en Segunda División. Será la primera vez que asturianos e ibicencos se midan en su historia (el club pitiuso se fundó en el año 2015 y lleva el mismo nombre que el Unión Deportiva Ibiza-Eivissa).
El Oviedo apostará por un guion similar al de las últimas jornadas, primando el juego directo y el fútbol ofensivo. Salvo giro inesperado, Ziganda volverá a repetir el esquema de dos delanteros, con Obeng y Bastón en la punta de ataque. Los ensayos durante la semana así lo han indicado. Lo más probable es que el navarro repita el mismo once de la pasada jornada, aunque no puede descartarse algún mínimo retoque. Brugman y Jirka, mediocentro y extremo, son los dos jugadores que podrían entrar de optar el Cuco por alguna mínima modificación. La única baja del Oviedo es la de Marco Sangalli, lesionado. El Ibiza, por su parte, llega a la cita sin perder, pero tampoco sabe lo que es ganar en su propio estadio. La escuadra de Juan Carlos Carcedo ha tenido una semana atípica en cuanto a entrenamientos al tener que modificar el campo habitual en el que trabajan debido a la resiembra del césped. Los celestes quieren aprovechar el buen momento del delantero centro Castel, que ha marcado en los tres últimos partidos, y posiblemente también repetirá titularidad Nono. “Intentaremos contrarrestar lo bueno que tiene el Oviedo”, dijo ayer Juan Carlos Carcedo, técnico del Ibiza.
