La Asociación de Peñas del Real Oviedo (APARO) ha publicado esta mañana un comunicado en el que explica su postura respecto al operativo para que la afición del Sporting acudiera al derbi y condena la actuación de la policía en las horas previas, que considera “una vergüenza” y “desproporcionada”.

Sobre las reuniones en la Delegación de Gobierno, la APARO explica que “los representantes de la afición del Sporting mostraron desde un principio su negativa a viajar en autobuses al Tartiere y su consiguiente rechazo al dispositivo de seguridad. Su postura pasa por suprimirlo o, de no poder eliminarlo, aplicarlo a una parte de aficionados -concretamente 300-. Sin tan siquiera explicar los motivos o el criterio que los lleva a decidir que una parte de sus aficionados son merecedores de ir custodiados policialmente y otros no”.

X. FERNÁNDEZ

Las peñas azules explican que “por parte del resto de asistentes se expuso el riesgo que conlleva no tener a los aficionados visitantes controlados en todo momento” y que su propuesta iba dirigida a “reducir los tiempos de protocolo de viaje”, al entender que “no es de recibo jornadas de 8 o 9 horas”. Una propuesta que habría sido vista “con buenos ojos” por la Delegación de Gobierno. Y añade: “Quien se opuso fue el representante de la parte sportinguista, que manifestó su imposibilidad para organizar un desplazamiento en autobús de Gijón a Oviedo en una semana”.

“Acusar a la APARO y a sus representantes de amparar la violencia es inaceptable”, dice el comunicado, que acusa a los rojiblancos de filtrar contenidos de la reunión y elevar el clima de tensión. 

La APARO señala que el recibimiento al autobús del Oviedo por parte de la afición “se vio contagiado por el clima de tensión que rodeaba al encuentro” y que la Policía Nacional de Oviedo “se dejó contagiar” tanto “en registros en bares con sedes de peñas” como con “las cargas policiales”, algo que considera “desproporcionado”.

Para las peñas azules, la utilización de unidades policiales con equipos de protección antidisturbios “es una auténtica vergüenza” en “bares de barrio con familias con niños en su interior”. Y consideran desproporcionadas las cargas previa al partido al producirse “únicamente porque la gente se acerca demasiado al autobús”. 

La APARO finaliza el comunicado reiterando su intención de viajar al choque de El Molinón de la segunda vuelta.