A Alonso Aceves se le vio en pretemporada subiendo y bajando la banda, una y otra vez, para llegar a línea de fondo y poner centros. Un lateral de alma ofensiva, comenzó a pensar el aficionado del Real Oviedo tras esas primeras impresiones estivales. Un error de apreciación, señalan los que conocen de cerca el juego del lateral. Porque en Aceves, argumentan en el club, su fuerte es la defensa. Ante el Andorra, el azteca fue el único fichaje de esta temporada que logró colarse en el once inicial. Y a pesar del resultado dejó un buen sabor de boca en sus primeros 90 minutos como futbolista del Oviedo. Fue una de las buenas noticias de una tarde aciaga.
"Llega y centra bien, pero él es un especialista defensivo", insisten desde el club cuando se pregunta por uno de los grandes desconocidos de cara a esta temporada. Y lo argumentan con un dato: Aceves acabó la temporada pasada en el top10 de duelos defensivos ganados en la Liga mexicana, tal y cómo se recoge en la web golstats.com. A pesar de su edad, el zaguero da muestras de conocer el oficio.
Se vio ante el Andorra, partido en el que le tocó afrontar varios uno contra uno, especialmente en la fase inicial. Siempre bien perfilado, el mexicano salió victorioso de cada envite. En ataque también se dejó ver, en la línea de lo que había mostrado en la pretemporada. Con cinco envíos al área, fue el jugador del Oviedo que más centró ante el Andorra. No todos fueron bien ejecutados, pero su tendencia fue siempre a mirar hacia arriba.
Enel estreno influyó el factor suerte. La titularidad de Aceves fue en parte beneficiada por la lesión de Carlos Pomares a tres días del debut. El valenciano tenía todas las papeletas para iniciar la competición en el once inicial. Fue titular en el ensayo general ante el Racing de Santander de la semana anterior. Todos los elegidos por Bolo aquel día, salvo el lesionado Pomares, repitieron como titulares contra el Andorra.
Pero Aceves se coló por la rendija que dejaron las molestias de su competencia en el puesto y aprovechó su oportunidad. Fue uno de los destacados, tanto en impacto en el juego como en condiciones físicas. Otro dato que revela su influencia sobre el terreno de juego: completó 27 esprints por encima de los 24 kilómetros por hora. Una cifra inusualmente alta en la categoría.
Aceves fue el primer gesto directo sobre la planificación deportiva que cerró el Grupo Pachuca a su llegada al Oviedo. Como sucedió con otros futbolistas del grupo, Pachuca puso sobre el tablero de la dirección deportiva la opción de contratar el lateral. Tito y Bolo valoraron sus condiciones, tras visionar los videos correspondientes, y dieron el visto bueno a su fichaje. No todos los futbolistas ofrecidos por Pachuca pasaron ese filtro que sí superó Aceves.
Ahora, se abre para él la oportunidad de hacerse un hueco en el fútbol europeo, después de un año en el que irrumpió en Pachuca, en un club con una exigencia alta al pelear en la parte alta de la tabla. La temporada pasada, a las órdenes de Guillermo Almada, logró hacerse con un hueco habitualmente en el once inicial. Fue titular en la mayoría de encuentros del Clausura de la Liga Mx, 22 encuentros y más de 1.900 minutos (fue el futbolista sub-21 con mayor participación en el torneo), y estaba llamado a ser un futbolista importante de cara al Apertura que ya está en juego desde hace semanas. El cambio de propiedad en el Oviedo hizo que cambiaran drásticamente los planes para él. De 21 años, para Aceves esta supone su primera experiencia lejos de México. Llegó cedido, pero nadie descarta que la relación entre el futbolista y el Oviedo se prolongue si las cosas van bien.
