El Real Oviedo, recibido con aplausos por decenas de aficionados a su llegada al Carlos Tartiere

Plantilla y seguidores mantienen la calma a pesar del buen resultado cosechado en Almería (1-2)

Así fue el recibimiento a los jugadores del Real Oviedo tras el triunfo en Almería

Mario Canteli / Amor Domínguez

A. D. / A. L. / M. C.

Oviedo

Hubo aficionados en la rampa del Carlos Tartiere cuando el autobús del Real Oviedo llegó a su guarida tras cumplir sobradamente con el objetivo en Almería. Los de Paunovic ganaron por 1-2 en el Estadio de los Juegos Mediterráneos y encarrilaron una primera elminatoria por el ascenso a Primera División que deberán rematar el miércoles (21.00 horas) en el municipal ovetense, con toda su gente. Ese es el día.

A pesar de todo, décenas de aficionados quisieron aplaudir a los jugadores en su llegada a la ciudad. Había banderas y alegría entre un oviedismo que, a pesar de la contención, sueña a lo grande con rematar un ascenso que se rozó con la yema de los dedos la pasada temporada. Aplaudieron al autobús a su llegada e hicieron lo propio con cada uno de los jugadores cuando fueron saliendo en sus vehículos particulares.

Diferente fue el caso de Paulino de la Fuente, que abandonó las instalaciones azules caminando, por lo que pudo entrar en contacto con los seguidores concentrados en torno a la rampa de acceso al campo. El cántabro firmó autógrafos y recibió de cerca el cariño de una afición que vive con emoción esta nueva oportunidad de subir a la máxima categoría. Rodeado de banderas y camisetas azules, con rostro cansado pero satisfecho, De la Fuente agraredeció el cariño antes de marcharse.

Todos, aficionados y jugadores, saben que este es solo un paso en el camino hacia la glora. Quedan tres.

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