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Así se aprende a curar sin riesgos: en un centro pionero que diseña escenarios "a la carta"

El Instituto de Emergencias IEDUCAE inaugura un espacio novedoso para el desarrollo de distintas habilidades

Así funciona SIMULAC, el centro pionero de simulación clínica que acaba de abrir sus puertas en Oviedo

Así funciona SIMULAC, el centro pionero de simulación clínica que acaba de abrir sus puertas en Oviedo VÍDEO: Amor Domínguez/ FOTO: Luisma Murias

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Así funciona SIMULAC, el centro pionero de simulación clínica que acaba de abrir sus puertas en Oviedo Amor Domínguez

Una mujer sufre un desmayo y se desploma cuando está corriendo por un parque. “¿Estás bien, estás bien?”, preguntan los viandantes, mientras intentan reanimarla”. Tras un momento de confusión, los testigos llaman a una ambulancia. “Que venga alguien pronto por favor”, ruegan a su interlocutor, mientras la zona empieza a llenarse de gente.

Es el escenario en el que tienen que trabajar Raúl Manzanal Cuesta y Manuel González Pereda, dos alumnos de segundo curso del Instituto de las Emergencias de Asturias (IEDUCAE). Ambos han seguido la secuencia, mezclados entre los testigos virtuales, en la sala inmersiva del centro de simulación clínica (SimulaC) que se ha estrenado en octubre en las instalaciones que IEDUCAE tiene en el polígono del Espíritu Santo (Oviedo).

Cuatro monitores a escala real muestran todos los ángulos de la escena y nos trasladan desde el lugar del suceso hasta el interior de la UVI móvil que ya ha llegado para prestar auxilio. “Este es el caso que os habéis encontrado y que recrea lo que puede ser una actuación real”, explica Félix Álvarez, formador de SimulaC. “Vamos a hacer la intervención en el interior de la unidad pero podríamos hacerlo fuera, con la gente caminando alrededor y en un entorno hostil por la tensión que suele generarse”, añade. “La actuación es siempre igual: llegamos, hacemos una valoración inicial y aseguramos la zona”, puntualiza.

Manuel González Pereda y Raúl Manzanal Cuesta, alumnos de IEDUCAE, hacen un ejercicio de reanimación en la sala inmersiva de SimulaC. Luisma Murias

Tras las indicaciones de su formador, Raúl y Manuel comienzan la exploración. El paciente sigue inconsciente, no respira, no tiene pulso y hay que iniciar la reanimación. Una aplicación monitoriza en tiempo real sus constantes vitales para comprobar si la maniobra se está ejecutando de forma correcta. “El objetivo es que los estudiantes aprendan a evitar errores y sepan reaccionar a los fallos”, argumenta Eva Rico, formadora de SimulaC.

La puesta en marcha de esta unidad formativa es la culminación de un proyecto que busca convertir a Asturias en un referente de la zona norte en este método de formación. “Es un sueño hecho realidad”, asevera su director, Juan Luis González Camblor. “Tuve la oportunidad de viajar a Madrid a conocer varias instalaciones de simulación clínica y parte de las ideas que plasmamos proceden de la Universidad Francisco de Vitoria. Aquí no hay ningún centro con estas características”, enfatiza.

A la izquierda, Manuel González, Raúl Manzanal y el formador Félix Álvarez, en el box de Urgencias. Luisma Murias

Las instalaciones se dividen en cinco partes: una sala inmersiva que permite reproducir cualquier escenario posible, un box de urgencias que puede hacer las veces de una UVI o una habitación de hospitalización, un aula de actividades en la que se trabajan habilidades técnicas como la intubación o la canalización de vías venosas, una zona de control desde la que el formador puede manejar los sistemas, y un área de briefing desde el que todos los alumnos pueden ver en tiempo real el trabajo que hacen sus compañeros en cada uno de los supuestos. “Esta parte es muy importante, porque con ella conseguimos que todos se involucren en las prácticas y hagan aportaciones. Tienen que estar observando para ver si sus compañeros lo hacen de forma correcta o no, y debatir cada caso”, detalla González Camblor.

El director de SimulaC, Juan Luis González Camblor, junto a la pantalla de la sala de briefing. Luisma Murias

En el box de urgencias, un hombre de treinta años, diagnosticado de asma, sufre una crisis respiratoria. La formadora Eva Rico modifica sus constantes vitales desde los ordenadores situados en la sala de control: “Tenemos varios dispositivos para manejar el aula de simulación, proyectamos los vídeos en la sala inmersiva y controlamos el maniquí de última generación con el que entrenamos las tareas”.

Es la primera vez que el sierense Raúl Manzanal y el lavianés Manuel González se enfrentan a una situación similar. “Es inevitable no ponerte nervioso porque nunca habíamos vivido nada así”, explican. “Esta tecnología tiene muchísimo potencial, tanto para estudiantes como para profesionales en activo; para nosotros es muy enriquecedor, porque aprendemos mucho y podemos ir desarrollando los casos en función de la respuesta de los alumnos”, añaden los formadores.

Las simulaciones están diseñadas para los estudiantes de IEDUCAE, pero podrían adaptarse a cualquier materia. “No queremos cerrarnos a la simulación clínica, aunque es nuestro fuerte porque nos dedicamos a la formación en emergencias. En la sala inmersiva podemos presentar casos relacionados con la atención al cliente o el trabajo con psicólogos”, detalla el director de SimulaC. El centro de simulación clínica de la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid tiene conciertos con las instituciones públicas para que los residentes de diferentes especialidades puedan formarse en sus instalaciones. La idea es establecer en Asturias un modelo similar. “Este proyecto ha supuesto una apuesta económica muy importante y queremos hacer un llamamiento para potenciar la colaboración público-privada. Nuestro objetivo es poner este recurso a disposición de todos los profesionales que lo necesiten para sacar el máximo rendimiento al centro”, subraya Juan Luis González Camblor.

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