La leche de plátano es una bebida muy popular hoy en día para quienes buscan una alternativa vegetal a la leche de vaca. Veamos sus características.

Una de las novedades de los últimos tiempos que se ha hecho muy popular es la leche de plátano. Esta bebida es una alternativa a la leche de vaca. Muchas personas han optado por empezar a beber esta leche en lugar de la de vaca, no sólo por creencias veganas, sino también por la intolerancia a la lactosa.

Cada día más gente opta por la leche vegetal. Entre ellas se encuentran la leche de almendras, de avena, de soja y de arroz. Sin embargo, este tipo de leche tiene unas características muy específicas, ¿es realmente mejor que la leche de vaca u otros tipos de leche vegetal?

Leche de plátano: características y cómo prepararla fácilmente en casa

Sabemos muy bien que el plátano, como toda fruta, tiene nutrientes muy útiles para nuestro organismo. Hacer leche de plátano es muy sencillo. Sólo hay que cortar un plátano, sin la cáscara, licuarlo y luego diluirlo con media taza de agua.

Sin embargo, esta bebida aporta menos proteínas que la leche de soja, de almendras y de nueces. Si la eliges para desayunar, debes complementarlo con algo más, como yogur o frutos secos. Desde el punto de vista energético, es similar a la leche de vaca, pero mucho más digerible.

Mientras que de la leche de vaca se puede obtener mucho calcio, en el caso de la bebida de plátano este mineral está mínimamente presente, pero se compensa con la presencia de vitaminas y minerales como el potasio y el magnesio. Relaja el sistema nervioso, facilita la digestión, aporta azúcares naturales y ayuda al organismo a producir más melatonina. Esto lo hace ideal para el desayuno por la mañana y también por la noche antes de ir a dormir.

Puede ser una ayuda valiosa para quienes padecen hipertensión arterial y puede ayudar a dormir mejor por la noche. Recuerda que siempre hay que consultar primero a un especialistas para saber si se debe tomar regularmente o no, ya que los plátanos, son muy ricos en calorías, carbohidratos y azúcares y no deben subestimarse si se tienen problemas de salud.