Si estás leyendo este artículo posiblemente hayas decidido dejar de fumar o te hayas planteado empezar a pensar en esa posibilidad. Pues bien, en ese caso tenemos una buena noticia para ti: has tomado una de las mejores decisiones de tu vida. Tu bolsillo y (sobre todo) tu salud te lo agradecerán. Si hace días te dábamos varios consejos para conseguir superar tu adicción al tabaco (aquí los puedes repasar) hoy en nuestra sección de Salud te contamos cuál es el mejor momento para dejar de fumar. En torno a este tema existe cierta confusión y conviene desterrar toda una serie de mitos que vamos a repasar en este artículo.

El 1 de enero, una fecha como otra cualquiera

Hay quién apuesta por el 1 de enero para dejar de fumar. Y para empezar al gimnasio y para hacer dieta… El primer día del año es más que propicio para hacer propósitos de año nuevo. ¿Quién no se ha propuesto algo alguna vez? El problema es que muy pocos se toman en serio estos retos. Dicen las estadísticas y los propietarios de gimnasios que en marzo se han borrado ya muchos de los que se habían apuntado en enero. Y con el tabaco pasa casi lo mismo. El 1 de enero muchos se cargan de propósitos y acaban desechando el más difícil: dejar de fumar. Con la resaca asociada al primer día del año muchos creen que podrán superar su adicción pero la vuelta al trabajo después de Reyes y el bajón que pega el cuerpo tras los excesos navideños y la recuperación de la rutina hacen que muchos decidan que “el año que viene lo vuelvo a intentar”.

En septiembre, a la vuelta al trabajo, no es buena idea

¿Y si lo dejo después del verano cuando vuelva al trabajo? Esta segunda idea tampoco es buena. Al volver al trabajo tras las vacaciones de verano todos tenemos la impresión de que volvemos oxigenados y llenos de energía. Sin embargo la rutina puede consumir todo ese positivismo en apenas unos días. Por eso no es buena idea dejar de fumar en septiembre. A nada que te sientas un poco presionado en el trabajo volverás a caer. Y las primeras semanas son las peores.

La fecha ideal: en vacaciones

Y por eso, porque las primeras semanas son las peores para dejar de fumar), es mejor que fumes tu último cigarrillo el día antes de quedarte de vacaciones. Así las primeras semanas, las más duras, estarás distraído y relajado. Además, el tabaco crea dos tipos de dependencias: la física y la psicológica. La primera pasa pocos días después de que te enciendas el último cigarrillo. Pero la segunda es más complicada. Mucho más. Por eso debes desterrar de tu vida todo lo que te recuerde al tabaco. ¿Al salir de trabajar te fumabas un pitillo de camino a casa? Pues es mejor que dejes de fumar semanas antes de tener que enfrentarte a esta rutina.

Ojo con la falsa seguridad

Pero ojo, al volver al trabajo no estará todo hecho. Dicen los expertos en adicciones que meses después de haber dejado de fumar se cae en lo que se denomina la “falsa seguridad”: crees que por fumar un cigarro no va a pasar nada y que puedes controlarlo pero tu cuerpo recuerda su adicción y tendrás que volver a empezar de cero.

No lo dejes para el último día

Y si la constancia es fundamental para dejar de fumar, también es imprescindible que te planifiques: no pienses que puedes romper con el tabaco de un día para otro. Si tu idea es dejarlo el 1 de julio coincidiendo con tus vacaciones empieza a pensarlo antes. En la segunda quincena de junio, por ejemplo, reduce a la mitad tu consumo de cigarrillos.