Las intolerancias son un problema con el que muchas personas tienen que lidiar a diario, obligadas a renunciar a muchos productos. En particular, la intolerancia a la lactosa nos lleva a renunciar dolorosamente a nuestros apreciados productos lácteos. De hecho, además de la leche, también se excluyen, lamentablemente, los derivados como el yogur, el queso, salvo los muy maduros, y la mantequilla.

Sin embargo, empezar el día con una tostada untada con mantequilla y mermelada es un placer del que no podemos prescindir. De hecho, a continuación veremos cómo hacer una deliciosa mantequilla sin lactosa y, como valor añadido, sin colesterol. El ingrediente principal de la mantequilla vegetal que vamos a elaborar es, de hecho, el cacahuete.

Nueces de otoño

Los cacahuetes se cosechan generalmente en el periodo otoñal, entre septiembre y octubre, aunque, en la actualidad, están disponibles todo el año. Como se ha mencionado, se dice que los cacahuetes no sólo no tienen colesterol, sino que sus grasas monoinsaturadas ayudan a reducir el colesterol malo (LDL) en favor de aumentar el bueno (HDL).

Por supuesto, antes de consumir cacahuetes y, en general, frutos secos, siempre es conveniente comprobar si somos o no alérgicos a ellos. Aunque la mantequilla de cacahuete puede ayudarnos a evitar la intolerancia a la lactosa o las alergias, podríamos encontrarnos con una reacción alérgica a los propios cacahuetes. Dicho esto, vamos a ver cómo hacer una excelente mantequilla de cacahuete en unos sencillos pasos para utilizarla en nuestros platos dulces y salados.

Una deliciosa mantequilla sin lactosa ni colesterol para hacer en casa por unos pocos euros

Los ingredientes para hacer mantequilla de cacahuete son sólo 2 y son:

  • cacahuetes 500 g
  • aceite de cacahuete 40 ml.

La preparación que más tiempo requiere de la mantequilla entera será despojar a los cacahuetes de sus cáscaras y pieles exteriores. Así que armémonos de paciencia y empecemos por quitar las cáscaras de los cacahuetes. Una vez hecho este proceso, coloca los cacahuetes en un paño limpio, ciérralo y frótalo para que la piel del cacahuete se desprenda más fácilmente.

Cuando todos los cacahuetes estén limpios, páselos a una batidora junto con el aceite de cacahuete. Mezclamos todo a máxima potencia hasta que la mezcla haya adquirido una consistencia suave y cremosa. Si queremos, podemos endulzar ligeramente la mantequilla añadiendo azúcar moreno o miel. Y en pocos minutos hemos hecho una mantequilla de cacahuete perfecta para usarla en el desayuno, quizá acompañada de un vaso de leche vegetal contra la pereza intestinal.