Plato que pone la mesa de los domingos y que siempre reúne a todos, el pollo asado es una tradición para algunos, pero no tanto para otros.

Pero independientemente de la frecuencia con la que solemos comerlo, el pollo se puede comer de diferentes maneras y la elección es puramente subjetiva. Pero, ¿cuál es el mejor para su salud? Intentamos entender cómo se come el pollo y si se debe mantener la piel o no.

Entre las carnes más consumidas, por ser baja en grasas, barata y sin barreras religiosas o culturales, el pollo es también muy popular por su riqueza en minerales, vitaminas y proteínas, además de ser realmente sabroso. Y para los que valoran más lo segundo que lo primero, seguro que también comerán la piel, que es incluso más apetecible que la propia carne.

Pero, ¿es realmente bueno comer piel de pollo? Esta pregunta fue respondida por un nutricionista, que afirmó que la piel tiene aproximadamente un 32% de grasa. Así, si consideramos 100 gramos de piel, hay que tener en cuenta que 32 gramos de ésta tienen un alto contenido en grasa. Por eso, si el pollo se come con piel, la ingesta de calorías podría aumentar alrededor de un 50% por ración.

Por lo tanto, la conclusión es bastante obvia. Lo ideal es comer pollo sin piel, al menos si quieres mantenerte en forma y cuidar tu figura. Pero ésta es sólo una de las dudas que rodean a este alimento. Algunas personas se preguntan qué tipo de piel es mejor, la amarillenta o la rosada. Pero en realidad no hay ninguna diferencia entre ambos, ya que el color simplemente varía en función de los pigmentos del maíz del que se alimentan los animales. Y como el maíz tiene más pigmentos que el trigo, la piel será automáticamente más amarilla.

Pero, ¿cuál es la mejor manera de descongelar la carne de pollo? Esta es otra cuestión que no da tranquilidad a mucha gente. Por eso puede ser útil ofrecer una solución también en este caso: la mejor manera de descongelar la carne de pollo es meterla en la nevera y dejarla esperar al menos un día. Nunca la dejes descongelar a temperatura ambiente, porque el riesgo de que los microorganismos estropeen la carne es mayor. Por esta razón, también debe evitarse la descongelación con agua caliente.

Ahora que ya sabes todo sobre cómo consumir correctamente este delicioso alimento, no te agobies más por las dudas y disfruta de tu pollo sin piel con confianza.