Los vecinos de Anes están “hartos de los residuos que emanan del túnel donde hacen prácticas los bomberos porque están poniendo en riesgo su salud con los vertidos”. Ayer por la mañana fue el último incidente: a las diez de la mañana empezó un humo con olor a gasolina y después a goma, según Francisco Blanco, uno de los principales afectados. “Dicen que es una cosa aislada y por eso no supone un riesgo, pero no es verdad”, indicó Blanco. En la imagen, dos de los vecinos, José Ramón Tomás (izquierda) y Francisco Blanco.