El Carmín de este año terminó libre de agresiones machistas, según el balance elaborado por el Punto Lila, que estuvo colocado en la calle San Antonio desde el viernes hasta el lunes. El horario del puesto fue de 20 a 24 horas, y en él se interactuó con un total de 81 hombres y 92 mujeres, de todas las edades (173 personas en total). La finalidad que perseguían las personas que acudieron fue la de recibir información ya que ahí se repartían materiales: folletos del Ayuntamiento de Siero y dos guías; una para adolescentes y otra para padres y madres. Este es uno de los objetivos que perseguía el Punto Lila.

El otro objetivo está más relacionado con acompañamiento y asesoramiento a aquellas personas que presencien algún tipo de violencia machista o a las propias víctimas, dado que funciona como un espacio de referencia. Y, en este ámbito, no ser requirió ninguna intervención. A su vez, la asociación Mil Voces Violetas también aprovechó la ocasión para tratar temas como la sexualidad, la prevención o cómo intervenir ante la violencia machista.

"La población de Siero consideró la actuación muy positiva, y tristemente necesaria", valoró la concejala de Igualdad, Mercedes Pérez, tras concluir las fiestas. Y aprovechó para recordar que, especialmente para los jóvenes, "el sexo sin consentimiento no es sexo sino una violación", y que todo el mundo tiene derecho a disfrutar de las fiestas: son "lugares de diversión", que "jamás deben justificar conductas que atenten contra la libertad y dignidad de las mujeres".

A su vez, las personas que acudieron al Punto Lila se preocuparon por los incidentes ocurridos a lo largo del año, según señaló la edil. En este sentido, si bien aún es pronto para la elaboración del balance de este año, el pasado año el Centro Asesor de la Mujer (CAM), en Siero, atendió a un total de 255 mujeres. De ellas, 92 personas acudieron para denunciar situaciones relacionadas con violencia de género, habiendo una especial afluencia en aquellos meses de desconfinamientos (desde junio hasta agosto). En los meses de marzo y mayo, así como noviembre y diciembre hubo menos demanda, lo que se explica, según algunos expertos y expertas, de que durante esos meses los maltratadores tuvieron el control absoluto sobre sus víctimas (restricciones de movimiento, cierres y cuarentenas).

La franja de edad que con mayor frecuencia acudió al CAM de Siero rondó entre los 30 y los 50 años. En los últimos años, según recoge el balance de la CAM, se aprecia un incremento en las mujeres cuyo estado civil es soltera. A su vez, en 2020 también se apreció un aumento en los casos de personas ya divorciadas que consultan temas relacionados con derecho de familia y violencia de género.

Haciendo un desglose de los casos de violencia de género, hubo un total de 53 mujeres que acudieron al centro por primera vez, y entre todas, se hicieron 541 consultas. Esto supuso un aumento notable respecto a otros años y se explica por dos cuestiones: mayor control desde el CAM y la situación derivada del coronavirus, en el que ha habido mayor demanda de información relacionada con ayudas económicas y recursos. Finalmente, en Siero en 2020 se registraron 45 órdenes de alejamiento, y un total de 90 mujeres de las que se hizo seguimiento. Y, según destacó el propio balance, muchas de ellas no eran conscientes de los recursos existentes para afrontar ese tipo de situaciones.

"La población está implicada y desea que este tipo de actuaciones algún día no sean necesarias. Este tipo de iniciativas son importantes", concluyó Mercedes Pérez en relación al punto Lila, en la misma línea que en la presentación del balance anual del CAM, donde animó a todas las mujeres que lo necesiten a acudir al centro, ya que es un recurso gratuito.