En un panorama plagado de grandes compañías eléctricas se bate el cobre una pequeña empresa familiar de Carbayín (Siero), que no está sacando tajada del alza sin control del precio de la luz. Explica Juan Díaz, director general de la firma sierense Electra Norte, que su paquete de energía ya estaba comprometido “antes de que surgiese esta subida desmedida de precios”. Por tanto, “este año no tendremos más beneficios”.

Sin embargo, a la vista de los derroteros del mercado, se plantean reconsiderar esta postura de cara a 2022: “Si sigue así, en vez de vender a un precio determinado la energía de todo lo del año, acudiremos al mercado. A nosotros, en ese sentido, no nos afecta, esa diferencia económica repercutirá en el cliente”.

Díaz habla con honestidad de la situación del mercado y de la de su propia compañía: “Nosotros somos una empresa pequeña, con una clientela determinada y un parque eólico pequeño de 6 megavatios, en Boal. Lo que hacemos es cubrirnos, comprar productos a futuro y, según al precio al que adquiramos la energía, se lo trasladamos al cliente”.

A la vista de la situación, al Director General de Electra Norte no le extraña de que haya enfado entre la ciudadanía por la subida de costes “Creo que a nosotros nos ven como una compañía pequeña que, además, revierte el beneficio en el pueblo. Si se incrementan los ingresos, también aumentaría lo que podemos destinar a esta parte. Es cierto que las grandes compañías hacen sus trampas con la energía nuclear y otras y, aunque digan que no, tienen unos márgenes de beneficio enormes”, concluye el sierense. En el caso de la eléctrica de Carbayín, incluso se plantean la posibilidad de incrementar su plantilla, “en caso de que la cosa fuera bien y lo necesitásemos”.